Edison Figueroa, de 30 años, recibió cuatro puñaladas en el estómago, para robarle su carro Fiat Cielo, color blanco. Estaba desaparecido desde el pasado jueves cuando salió a trabajar.
Caracas. En ambos brazos se tatuó el rostro de sus dos hijos y gracias a esto pudieron reconocerlo en la morgue de Bello Monte. Edison Figueroa, de 30 años, ingresó el pasado sábado luego de que localizaran su cuerpo sin vida en el túnel de Los Ocumitos, estado Miranda.
Estuvo desaparecido desde el jueves 8 de diciembre cuando salió a trabajar, luego de las 5:00 p. m. Era taxista en una línea de Chacao desde hace cinco años y solía laborar hasta la madrugada, solamente con clientes asignados.
Su esposa mantenía comunicación constante con él, pero el jueves a las 10:00 p. m. no supo más. Ante esto, sus parientes estuvieron buscándolo por hospitales y comisarías durante el viernes y el sábado, hasta que decidieron ir a la morgue el domingo, donde lo hallaron.
Su cadáver presentó al menos cuatro puñaladas en el estómago y se encontraba sin camisa. Sus familiares desconocen qué pasó, ya que la poca información que tienen la obtuvieron en la medicatura.
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A Edison le robaron su carro marca Fiat modelo Cielo, color blanco, con que cual tenía tres años. Anteriormente, había sido víctima del hampa —al menos tres veces— pero solo para el despojo de objetos personales.
Vivía en el barrio La Bombilla de Petare y dejó huérfanos a dos hijos, de 14 y 12 años. Su único hermano vive en Colombia y este lunes se trasladó hasta Venezuela para asistir al entierro y acompañar a su familia en este duro momento.
Se conoció de manera extraoficial que durante este fin de semana fueron ingresados al menos 48 cadáveres a la morgue de Bello Monte. En lo que va de diciembre se han registrado cerca de 165 muertes en el Área Metropolitana de Caracas.
Foto referencial: Miguel González
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