Este martes, en rueda de prensa, el gobernador de Bolívar, Justo Noguera, informó que las bandas en el sur de la región mantienen a pequeños mineros esclavizados, algo que ya ha sido denunciado en otras oportunidades.

Ciudad GuayanaEn más de una oportunidad, el diputado Américo de Grazia (La Causa Radical) ha acusado al régimen de Nicolás Maduro de mirar con permisividad las pandillas o bandas que dominan las zonas mineras del sur de Bolívar.

El parlamentario y exalcalde del municipio Piar ha explicado que esa permisividad obedecía una lógica: que las pandillas tomen el control de las minas para resguardar lo explotado. Todo era así hasta que entró un nuevo actor en escena: el Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Según De Grazia, la penetración de la guerrilla en las minas tiene como meta sanearlas de esas bandas, cuya entrada -según palabras del parlamentario- permitió el mismo Gobierno. Y sanear significa eliminarlas del lugar y a como dé lugar.

Hoy, en Bolívar, muchos toman como ciertas las palabras de De Grazia, pues, desde el fin de semana, fuerzas armadas del régimen emprendieron una cacería a una de esas bandas: la de Jesús Enrique Zurita, alias “el Coporo”.

El sábado, en Tumeremo, funcionarios del Ejército, de la Guardia Nacional y del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) -en lo que el Gobierno asegura fue enfrentamiento- mataron a siete integrantes de la banda.

Este martes, el gobernador Justo Noguera, junto con Jesús Mantilla, jefe de la Región Estratégica de Defensa Integral (REDI) Guayana,  y Lisandro Alfonso, jefe de la Región Estratégica de Investigación Penal (Redip) Guayana del Cicpc, prometieron en rueda de prensa continuar desplegando operativos como el del sábado.

Informaron que en el operativo de ese día incautaron: nueve fusiles, dos pistolas, una ametralladora, cinco escopetas, dos vehículos, 15 cargadores y 22 cartuchos de varios calibres. También, que detuvieron a quince personas.

¿Ahora sí?

Noguera señaló que las bandas que operan en el sur no solo extorsionan, asesinan y cobran vacunas, sino que también esclavizan mineros.

“Los tenían sometidos a situaciones de fuerza, de extorsión, de esclavitud, incluso de secuestro. Se trajeron a unas personas del estado Sucre, las insertaron en la zona bajo engaño y amenazas para obligarlos a trabajar bajo un esquema de esclavitud”.

Denuncias de este tipo han sido formuladas en varias oportunidades por otros voceros.

El mandatario regional prometió:

Vamos a iniciar el saneamiento, no vamos a permitir que sigan estas acciones de violencia entre bandas, y que sigan extorsionando a nuestros mineros”.

El gobernador oficialista y el parlamentario de oposición coinciden en usar la palabra “saneamiento” para calificar lo que está sucediendo en las zonas mineras, aunque con distintas acepciones.

Foto Cortesía


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