La temporada 2015-2016 del baloncesto criollo arranca este viernes con la pelota en pleno apogeo. Directivos asumen con optimismo el reto de competir con la LVBP.

Caracas. La temporada 2015-2016 de la Liga Profesional de Baloncesto (LPB) tendrá por primera vez el reto de disputar la preferencia de los aficionados en la etapa culminante del campeonato favorito de los venezolanos. La exigencia de la Federación Internacional de la disciplina (FIBA) de ajustar los torneos locales al calendario internacional obliga al “deporte de los gigantes” a arrancar este viernes cuando la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) estará en pleno apogeo competitivo.

Una porción dirigencial de los 10 quintetos que hacen vida en la LPB dijo afrontar el compromiso con optimismo durante la presentación de la nueva zafra. Paradójicamente, el primero en expresar su confianza es uno de los referentes históricos de la pelota criolla, el expelotero y presidente del circuito Bob “Comedulce” Abreu.

Ahora los seguidores del beisbol y del baloncesto podrán gozar de sus dos deportes favoritos al mismo tiempo. Es un logro de toda la directiva sacar este campeonato adelante en diciembre, señaló el maracayero.

El gerente general de Guaiqueríes de Margarita, Boris Villamizar, aseguró que la inventiva de los equipos se pondrá a prueba en un tema no menos importantes que la simpatía de la gente: el patrocinio.

Tenemos una visión diferente y un nuevo enfoque. El patrocinio en el país está acostumbrado a una metodología y cuando la cambiamos a veces no es muy bien vista, pero si la cambiamos para una relación ganar-ganar, con una reciprocidad de los equipos, creo que vamos a tener una mayor captación de esos patrocinios, explicó.

Para el presidente del subcampeón Guaros de Lara, Jorge Hernández, el hecho de medirse con la pelota es positivo en términos de espectáculo, lo que beneficiará a los amantes de ambas disciplinas. Nosotros vamos a tener que presentar un mejor espectáculo y el beisbol también. Aquí el que gana es el fanático. Es una competencia sana, indicó el mandamás crepuscular, quien ve saludable un acercamiento entre las tres principales ligas deportivas criollas, incluyendo la de fútbol.

“Debemos reunirnos cuando se definan los calendarios para beneficiar al fanático. Que pueda escoger y que no choquemos. Hay que tomar retos”, aseveró.

El tercer aspecto clave de esta “confrontación”, que durará apenas dos meses, pues la LVBP termina en enero y la LPB en mayo, es la televisión. Y las mismas señales que transmiten desde los diamantes estarán en los tabloncillos. Para evitar, la coincidencia en choques importantes de ambas campañas, el gerente de Directv Sports, Carlos González, asomó la posibilidad de cambiar el horario de algunos partidos del básquet, en especial los fines de semana.

Costos por las nubes

La competencia con el beisbol no es el único obstáculo con el que deberán lidiar los equipos. El incremento en los  costos logísticos y operativos también es una dificultad a sortear por los 10 conjuntos, que buscan opciones ante la crisis.

“Tratamos de mantener nuestros contactos y asegurar que la gente que nos maneja la logística se mantenga trabajando para que el equipo no sufra en los traslados y en la alimentación. El alojamiento no será de la misma calidad”, adelantó el gerente general de Bucaneros Alberto Díaz.

En el caso de Guaiqueríes, la intención es amortiguar el golpe inflacionario mediante convenios con hoteles y líneas aéreas. No obstante, pese a los esfuerzos, los directivos no siempre pueden cuadrar la logística como  quisieran. Un ejemplo de ello es la suspensión de los partidos de viernes y sábado entre los maragariteños y Toros de Aragua por la falta de disponibilidad de boletos de avión y alojamiento para los astados.


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