Presidentes de líneas interurbanas en la región han denunciado que el suministro de gasolina es prácticamente inexistente, lo que afecta no solo la movilidad de los usuarios, sino también la manutención de al menos tres grupos familiares por unidad de transporte.
Maracay. En Aragua, el suministro de combustible sigue siendo un problema para miles de conductores, a pesar de que el ministro de Petróleo, Tareck El Aissami, prometió que para finales de junio las colas frente a las estaciones de servicio desaparecerían, luego de que las refinerías del país reactivaran la producción de gasolina.
Pese al anuncio, la escasez de gasolina en Aragua no cesa, y de ello dan cuenta las interminables colas de vehículos que se observan en todas las estaciones de servicio de la entidad, lo que afecta gravemente el aparato productivo de la región y la movilidad de cientos de usuarios del transporte público.
Y es que los transportistas en Aragua siguen reclamando combustible para continuar con la prestación del servicio, porque, de lo contrario, aumentará el porcentaje de las unidades que usan gasolina que actualmente se encuentran paralizadas.
En el estado tenemos un promedio de 65 % a 70 % de unidades trabajando, pero el 30 % de las que funcionan con gasolina están paralizadas”, refirió Alí Escalona, presidente de la Unión Palo Negro.
Ello dificulta que el ya mermado transporte público cubra la demanda de usuarios del servicio, por lo que las colas de ciudadanos en el terminal de pasajeros de Maracay y en las diferentes paradas también son evidentes.
Limitados
Los transportistas solo pueden surtir un promedio de 100 litros de gasolina, lo que apenas les alcanza para realizar uno o dos viajes al día, dependiendo de la ruta, y les impide prestar un servicio de manera continua.
Hay líneas, explicó Escalona, cuyas unidades usan gasolina y los conductores permanecen hasta 20 o 30 días sin prestar el servicio.
Para Escalona, la escasez de combustible representa un problema social, toda vez que muchas personas dependen de los ingresos que los transportistas perciben por el servicio.
Si se toma en cuenta que de cada unidad dependen el propietario, el conductor y el colector, son tres grupos familiares que, a decir del presidente de la Unión Palo Negro, han dejado de percibir ingresos para el sustento diario.
Hemerson Gavidia, presidente de la Unión San Agustín, se sumó al reclamo de sus compañeros para que el gobierno de Nicolás Maduro y la empresa Pdvsa normalicen la distribución de combustible en el país.
Hemos planteado la situación al Frente Unido de Transporte, al comando intergremial, a Pdvsa y al mismo Gobierno nacional, y seguimos sin respuesta concreta”, afirmó.
De acuerdo con el presidente del FUT, José Luis Trocell, aunque el suministro de gasoil tiende a regularizarse a al menos tres o cuatro veces por semana, entre 600 y 700 unidades que operan con gasolina en la región no pueden prestar el servicio de manera regular.
“Estamos a punto de una crisis humanitaria en el sector de transporte público, debido a la gran cantidad de compañeros que no pueden llevar el sustento a sus familias”, refirió.
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