Los animales estuvieron dos días sin agua ni alimento y atados a un tronco sin corral que los protegiera de la autopista Valle-Coche. Posteriormente mejoraron sus condiciones, y se espera que lleguen otros ejemplares para completar el nacimiento viviente.  

Caracas. Un caballo, dos burros, un toro y otros animales de granja hacen vida en el Paseo Los Ilustres, parroquia San Pedro, por la construcción de un pesebre viviente que realiza la Alcaldía de Caracas y que tiene como fecha límite el próximo 1° de diciembre. 

“A toda hora” están trabajando los obreros que pertenecen al Plan Caracas Juntos Todo Es Posible y a Chamba Juvenil para terminar las remodelaciones que se retomaron en octubre de este año y tenían previsto como fecha de culminación el 25 de noviembre de 2018. Según declaraciones de los empleados, “prefieren adelantar sus labores en la noche” para no someterse a muchas horas de sol. 

Un obrero que prefirió mantenerse en el anonimato comentó a Crónica.Uno que los animales “son privados” de la corporación de trabajo, y no ofreció más detalles acerca de su procedencia.  

Foto: Tairy Gamboa.

Alrededor de la construcción también hay electricistas que están instalando el alumbrado para darle color al nacimiento viviente cuando se abra al público.

Crónica.Uno constató el 12 de noviembre pasado que los animales no contaban con comida y agua en el lugar, estaban atados a troncos de madera y no había alguna cerca segura para evitar que fueran robados en la noche o pudieran escaparse por la autopista Valle-Coche. Dos días después, mejoraron sus condiciones y parecía garantizada su alimentación. 

El obrero también dijo que en los próximos días podrían llegar otros ejemplares para complementar el nacimiento viviente. Mientras tanto, algunos niños de colegios cercanos y transeúntes que pasan por el sitio se toman fotografías y muestran interés por lo que realizarán en esa zona. 

Una idea sumada a la remodelación del paseo 

Desde el año pasado se han realizado trabajos en Los Ilustres para enaltecer este patrimonio cultural de la ciudad capital. Sin embargo, para algunos vecinos del sector resultó innecesario disponer tanto dinero en la remodelación, tomando en cuenta que el país necesita solucionar otras carencias.

En los últimos días se ha visto que los trabajadores realizan los arreglos finales y se han dedicado a plantar algunas especies de flores, talar árboles, finiquitar labores de pintura y terminar la instalación de la baldosa que sustituyó el famoso mosaiquillo que arropaba todo el paseo y estuvo expuesto a tres remociones de suelo.

Los transeúntes reiteraron que el camino se ha vuelto peligroso porque es resbaloso debido al material que fue utilizado.

Foto: Tairy Gamboa.

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