Todos los domingos, Barberos con Propósito une esfuerzos para llevar alegría a las comunidades más vulnerables de la región zuliana con cortes de cabello, comida y sonrisas. Estos tres jóvenes sueñan con poder ayudar cada vez a más personas.
Maracaibo. Enderson, José Miguel y Pedro son tres jóvenes profesionales de la barbería en Maracaibo que decidieron regalar sonrisas a las comunidades más vulnerables a cambio de un corte de cabello.
Una visita en 2017 a la comunidad de Ayapaina, en la Sierra de Perijá, fue suficiente para que Pedro Acosta de 30 años diera el primer paso. Cuenta que quedó enamorado de su gente, pero también preocupado por las condiciones de vida, así que en 2018 volvió con comida y ropa para los más necesitados de la serranía zuliana y al llegar a Maracaibo continuó la labor.
Me enamoré de la obra social y comencé a cortarle el cabello a los hombres y niños de mi comunidad en Haticos, cortaba entre 10 y 15 personas a la semana, gratis”, recuerda Pedro.
Graduado como ingeniero mecánico, con el paso del tiempo se fue especializando en barbería y en ese camino conoció a José Miguel Rivas. Este joven de 24 años estudiaba Administración, pero por no poder culminar la carrera también se convirtió en barbero. Luego se unió Enderson, de 30 años, y desde entonces se han convertido en un trío que regala esperanza.
Un propósito
Barberos con Propósito ha llegado no solo a las comunidades más necesitadas de Maracaibo, San Francisco, Mara, Jesús Enrique Lossada y Guajira, sino que ahora también visitan centros de salud. Han ido al hospital Dr. Pedro Iturbe, conocido como el General del Sur y el Hospital Universitario de Maracaibo donde, además, reparten 120 almuerzos una vez por semana.
Cada vez son más los que se suman a estos tres jóvenes “para ser instrumentos de Dios”, como ellos mismos definen su obra.
Ahora el grupo es de casi 25 personas en cada jornada. Ayudan a servir la comida, organizar a la gente que se va a cortar el cabello, la consulta médica y hasta la entrega de medicinas.
“Toda la gente que se quiera unir a cada actividad, se une. Cuando nos solicitan a través de las redes asistencia en alguna comunidad, nos organizamos primero nosotros para ver qué podemos aportar porque todo lo que llevamos sale de nuestros bolsillos y después hacemos el plan de acción con todos los que quieran asistir a ayudarnos”, explicó Pedro.
Ayudar al prójimo
La premisa de los barberos está fundamentada en la hermandad y las ganas de ayudar al prójimo. En sus redes sociales resalta la cita bíblica: Hechos 20, 35. “En todo os he enseñado que trabajando así, se debe ayudar a los necesitados y tener presentes las palabras del Señor, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir”.
Enderson explicó que aunque las comunidades asistidas muestran su agradecimiento por esta loable labor, la realidad los golpea.
Cada vez hay más necesidad en la calle, más hambre. Es inevitable que a uno se le arrugue el corazón al ver esa realidad”, dijo.
Actualmente los tres tienen trabajos estables en barberías reconocidas de la ciudad y esa es la fuente de ingresos que manejan para la asistencia social, pues hasta la fecha ningún ente los ha apoyado. Aun así, siguen con pie firme y no paran de soñar.
A veces es difícil para nosotros cubrir las necesidades de tantas personas, pero siempre hacemos que alcance para todos. Nuestro sueño es que esto crezca para ayudar a más y más personas”, dijo José Miguel.
Van por más
En las jornadas que se hacen todos los domingos del mes hay una asistencia de 50 a 130 personas, sin contar los cortes que siguen haciendo entre semana en sus comunidades, así que la meta para este año es seguir avanzando.
Es increíble como tantas personas no tienen con qué pagar un corte de cabello porque el dinero que tienen apenas les alcanza para comer. En las comunidades nos dicen que con lo que se ahorran del corte pueden comprar harina, arroz y esas cosas”, dijo Enderson.
Para los barberos, estas actividades les llenan el corazón de gratitud, pues aseguran que aunque ninguno ejerce la carrera en la que se graduó, por falta de oportunidades laborales y bajos ingresos, agradecen que este oficio les abra puertas para ayudar en medio de la crisis.
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