Desde hace un mes, los vecinos de El Trigal Centro viven con constantes apagones que, en algunos casos, les impiden hasta cocinar alimentos. Aseguran que muchos artefactos eléctricos se han descompuesto. No solo padecen del mal servicio eléctrico sino que también se quejan por la falta de agua potable.
Valencia. Vecinos de El Trigal Centro, al norte de Valencia, se apostaron en la casa del gobernador de Carabobo, Rafael Lacava, con la intención de llamar la atención del mandatario regional mediante una protesta sobre los constantes apagones que se registran en la zona desde hace un mes, y que afectan a unos 4000 valencianos.
Desde la tarde del sábado hasta la noche del domingo, el servicio eléctrico fue interrumpido por 22 horas. Algunos electrodomésticos, como neveras, refrigeradores, aires acondicionados y computadoras, se averiaron, debido a que los trabajadores de Corpoelec, durante el proceso de reactivación del servicio eléctrico, intentaron unas ocho veces la recuperación de la energía.
Soraida Khair, madre de dos niños, se quejó de que las fallas eléctricas no le permitían cumplir con sus labores diarias e, incluso, alimentar a sus hijos.
No podemos tener una vida normal. Yo, por lo menos, tengo cocina eléctrica y ayer [domingo] no pude hacer comida para mis hijos. Se duerme mal. La falta de electricidad genera un mal vivir”.
María Burguillo, residente de la zona, comentó que los constantes apagones se deben a que hace un mes se averió un transformador. Desde ese entonces se inició el calvario de estas personas. En ocasiones, pasan todo el día con el servicio eléctrico intermitente. Además, calificó de poco diligente las respuestas que reciben de Corpoelec: “Nos dicen que ya mandaron la cuadrilla, pero nunca llega o, si no, dicen que debemos esperar a que haya disponibilidad para atender la avería”.
Otra situación con la que también deben lidiar estos valencianos es con la falta de agua. Apuntaron que, pese a que el gobernador Lacava vive en la misma zona, no cuentan con la promesa que hizo el mandatario de abastecer a la población con cisternas. “Nos debemos parar en una esquina y si vemos un camión cisterna, rogarle para que nos regale un poquito de agua”, apuntó Khair.
Los afectados entregaron un documento en la Quinta Carabobo (residencia de Rafael Lacava) para solicitarle al mandatario regional que sea un intermediario con las autoridades de Hidrocentro y Corpoelec a fin de que solventen la crisis eléctrica y de agua lo antes posible. Proponen crear mesas de trabajo para salir adelante; además, están dispuestos a que el costo de los servicios públicos sea incrementado mientras sean de óptima calidad.
Fotos: Cortesía Juan Carlos Hernández
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