Una tarde de paseo se convirtió en tragedia para tres familias residentes del sector III del barrio La Ponderosa, cuando los cinco niños que viajaban con Francis del Valle Montaño Aguilera, de 42 años, murieron luego de que el vehículo que conducía cayera por un barranco en el sector La Liky, de la población de Naricual.

Barcelona. Temas como la ayuda humanitaria, el alto costo de la vida y la escasez de agua pasaron a un segundo plano este lunes en la capital del estado Anzoátegui. La trágica muerte de cinco niños en el sector la Liky, en la carretera que conduce a la población de Naricual en el municipio Simón Bolívar, fue el tema de conversación del día en cada punto de la ciudad de Barcelona.

Una tarde de paseo se convirtió en tragedia para tres familias residentes del sector III del barrio La Ponderosa, al enterarse durante la noche del domingo que los cinco niños que viajaban con Francis del Valle Montaño Aguilera, de 42 años, fallecieron tras regresar de un día de piscina en una finca ubicada en la zona sur de la capital anzoatiguense.

Según el reporte de la división de tránsito terrestre de la Policía Nacional Bolivariana, que levantaron el siniestro y del fiscal designado para investigar el caso, Ernesto Córdova, el accidente se produjo cuando Francis Montaño perdió el control del vehículo en que el que se desplazaba (una camioneta Ford Explorer año 2008 placas AC710SE), debido al mal estado de la vialidad y cayó por un barranco al río Neverí, provocando la muerte por inmersión de los pequeños.

La noticia causó tal revuelo en la populosa barriada capitalina, que muchos de los vecinos no contuvieron las lágrimas al enterarse de la muerte de los pequeños y el delicado estado en que quedó Montaño Aguilera, quien, según las autoridades y familiares, tenía seis meses de embarazo.

Estamos consternados, esos niños se paraban en mi ventana todos los días porque al lado de mi casa funciona la escuela del sector, es una pena como ocurrió todo, la verdad no tenemos palabras para describir este sentimiento, indicó Evelio Magdaleno, vecino de la Calle Negro Primero, donde vivían tres de los menores fallecidos.

Vecinos esperan este lunes la entrega de los cuerpos de los niños para rendirles homenaje en la escuela del sector. Una niña de 11 años, además de Francis Montaño, logró sobrevivir al accidente.


Participa en la conversación