El pasado 16 de abril el comando de la Guardia Nacional en Guayabita recibió un ataque de múltiples disparos, y este viernes 22 de abril, el Centro de Coordinación Policial ubicado en Pantín vivió un incidente similar al recibir una ráfaga de tiros. Hasta ahora no hay ningún pronunciamiento oficial sobre estos dos sucesos ocurridos en el municipio Mariño del estado Aragua. Los ataques a las sedes policiales y militares en esta entidad son de vieja data.
Maracay. En apenas una semana, sujetos fuertemente armados han atacado a tiros el comando del Centro de Coordinación Policial de Poliaragua ubicado en Pantin y el de la Guardia Nacional Bolvariana (GNB) ubicado en Guayabita; ambos en el municipio Mariño del estado Aragua.
A la medianoche de viernes 22 abril, aproximadamente 15 sujetos fuertemente armados que se desplazaban en una camioneta doble cabina y en dos motocicletas, dispararon contra el Centro de Coordinación Mariño III, adscrito a la Poliaragua, ubicado en el sector de Pantin, en el municipio Mariño.
Extraoficialmente se ha conocido que, la sede policial recibió al menos unos 100 impactos de bala de alto calibre. No hay reportes de lesionados, pese a que, para el momento del suceso, siete funcionarios policiales estaban de guardia.
Comisiones de la Policía Nacional, Guardia Nacional Bolivariana, Policía Municipal de Mariño, Cicpc, Dirección de Inteligencia y Estrategias Preventivas, DIEP, prestaron apoyo e iniciaron la búsqueda de los atacantes.
Durante el procedimiento policial realizado en varias barriadas del municipio Mariño, particularmente en el barrio Villeguitas, parroquia Turmero, fueron identificados cinco sospechosos que presuntamente se habrían enfrentado a los cuerpos de seguridad y resultaron heridos de gravedad. Fueron trasladados al ambulatorio de Turmero donde fallecieron horas más tarde.
Una semana antes, el Viernes Santo, también a medianoche, la sede del comando de la Guardia Nacional Bolivariana ubicada en el sector Guayabita, fue atacada a tiros desde un puente a escasos 100 metros de la sede.
En las paredes de este comando, quedaron evidencias de más de 200 impactos de bala. Tampoco se reportaron efectivos militares de guardia heridos.
Sobre ambos ataques, no ha habido ningún pronunciamiento oficial por parte de las autoridades regionales tanto de la Policía del estado Aragua, como de la Guardia Nacional Bolivariana.
En septiembre de 2021, un puesto de la Policía Nacional, ubicado en Magdaleno, municipio Zamora, recibió una ráfaga de disparos. En aquel entonces las balas impactaron contra varios comercios cercanos a la sede policial. Sin embargo, no hubo reportes de heridos o fallecidos.
Ataques de vieja data
Los ataques a comandos policiales o militares en Aragua no son sucesos nuevos. Los registros periodísticos dan cuenta de que este tipo de acciones delictivas, en contra de las sedes de los cuerpos de seguridad vienen sucediendo desde hace más de 5 años.
Después de que ocurren, nunca se ofrece un pronunciamiento oficial por parte de las autoridades policiales o gubernamentales de la región.
Antecedentes
En septiembre de 2017, la sede policial estadal en Magdaleno, municipio Zamora, fue atacada por un grupo de aproximadamente 30 sujetos con armas de guerra, artefactos explosivos y bidones con gasolina. En el hecho resultó herido el oficial Argenis Alejandro Méndez López.
Durante enero de 2018, la misma sede fue atacada nuevamente por 15 sujetos armados que hirieron al oficial jefe José Zerpa, de 33 años de edad.
El 8 de junio de 2019, a la comisaria de la Policía de Aragua ubicada en Los Hornos de Palo Negro, municipio Libertador, le lanzaron una granada que dejó dos civiles heridos, dos funcionarios policiales lesionados y daños materiales en la sede.
Un día después, varios sujetos fuertemente armados dispararon contra las sedes del CICPC, de la Policía de Aragua y de la Fiscalía, ubicadas en Turmero, municipio Mariño del estado Aragua,
Para noviembre de 2020, dispararon contra una ambulancia donde era trasladado un funcionario de la Poliaragua, que había resultado herido días antes, durante un enfrentamiento en el sector de Palo Negro, en el que los cuerpos policiales frustraban un secuestro.
En septiembre de 2021, la sede de la Policía Nacional en Magdaleno, municipio Zamora, sufrió de un ataque perpetrado por aproximadamente 20 sujetos todos fuertemente armados. En este hecho, varios comercios cercanos a la comisaria, recibieron impactados de bala.
La cuna del delito
El estado Aragua ha ocupado los primeros lugares, como uno de los estados más violentos del país, según el Observatorio Venezolano de violencia. De hecho, en el 2016, encabezó el registro levantado por el OVV.
En ese año, fue el estado en donde más ataques a sedes policiales se registraron. Solo la noche del 16 de septiembre de 2016, se reportaron ataques a 8 comisarías, donde prevaleció el uso de granadas por parte de los delincuentes.
Durante los subsiguientes informes, los municipios Girardot, Mariño, Zamora, Revenga, Santos Michelena y Bolívar, siempre aparecen como los más violentos del estado.
En el informe de 2021, el OVV señala que “Aragua, pasó a ubicarse en la quinta posición del país como estado más violentos, cuando en años anteriores, se encontraba en el primer lugar en violencia y que los municipios ubicados entre la quinta y décima posición como los más violentos de Venezuela, tres pertenecían al estado Aragua y eran: Zamora, Santos Michelena y José Rafael Revenga”.
El Observatorio Venezolano de Violencia destaca que el año 2021, en el país se registró una actuación ofensiva por parte del crimen organizado, que retaba a las fuerzas gubernamentales.
Ejemplo de ello, son las actuaciones de las bandas delictivas encabezadas por Carlos Luis Revette, alias “El Koki”, cabecilla de la mega banda de la Cota 905, quien resultó muerto en febrero pasado, durante un operativo de seguridad iniciado en Las Tejerías, municipio Santos Michelena en Aragua, para dar con la captura de otro delincuente que mantiene su centro de operaciones en esa localidad del eje este de Aragua, como lo es Carlos Enrique Gómez Rodríguez, alias “El Conejo”, aún prófugo de la justicia.
“Aunque esas ofensivas han recibido una respuesta por parte de las fuerzas policiales o militares, lo que se está evidenciando es una capacidad bélica, de equipamiento y de pie de fuerza de esos grupos para resistir, tomar la iniciativa e incluso derrotar, como es en el caso del estado Apure, a las fuerzas militares o policiales del gobierno nacional”, refiere el informe del OVV.
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