Comerciantes de El Cementerio prefieren cerrar ante el cobro de “vacunas”

El Cementerio

Quienes tienen sus negocios en la parroquia Santa Rosalía tomaron la decisión de bajar la santamaría, ante la extorsión de bandas armadas. Denunciaron que son secuestrados para negociar nuevas mensualidades.

Shaylim Castro/@ShayC_
Yohana Marra/@yohanamarra

Caracas. Desde que un grupo de delincuentes amenazó a Juan (nombre ficticio por seguridad) con quemar su bodega, en un barrio de El Cementerio, semanalmente debe pagarles casi 10.000 bolívares en efectivo. Y aunque en un principio no aceptó la exigencia, y cerró su negocio por dos meses, volvió para abrirlo por petición de los vecinos, con la condición de cumplir con los lineamientos de las bandas.

La extorsión o el cobro de “vacunas” se ha incrementado recientemente en zonas de El Cementerio. Por experiencias de colegas, muchos dueños están esperando que les llegue el momento de ser la nueva víctima.

Los afectados dijeron, de manera extraoficial, que los montos fijados por los hampones varían según el local y de las ventas que estos reporten, luego se llega a una negociación con el dueño para saber si optan por mercancía o pagar en efectivo.

“En diciembre del año pasado el dueño de una de las panaderías llegó a un convenio con los delincuentes y les tuvo que pagar una parrillada  para 50 personas. Pensó que eso sería todo, pero antes de Semana Santa de este año volvieron al negocio, y con granada en mano, los amenazaron para que comenzaran a pagar otra vacuna”, comentó uno de los comerciantes del boulevard César Rengifo, quien por motivos de seguridad no reveló su nombre.

El miedo y la paranoia se sienten de negocio en negocio, pues muchos ya conocen a los integrantes, normalmente adolescentes entre 16 y 17 años, que son los que se encargan de hablar y amenazarlos.

La trabajadora de una papelería lo piensa dos veces antes de salir si ve la presencia de algunos de los malandros. “Ya uno los conoce y evitamos salir o decir que vamos para el banco, por ejemplo, porque nos pueden perseguir para secuestrarnos o algo peor. Cuando hacen sus rondas procuramos no salir”, relató la joven muchacha que prefirió mantener el anonimato.

El Cementerio. 14 de Agosto de 2015. Angeliana Escalona. CronicaUno
A los comerciantes los llevan hasta sectores de El Cementerio, para realizar las negociaciones con los delincuentes, según testimonios de afectados

Según testimonios de varios comerciantes, no todos pueden cubrir las cuotas exigidas por las bandas y para evitar las amenazas de secuestro, o incluso muerte, han optado por bajar su santamaría.

Un restaurante de pollo en brasa, ubicado en la avenida Roosevelt, prefirió cerrar sus puertas luego de más de 20 años de servicio, pues según rumores de los habitantes los montos –aunque no dijeron cuánto- eran elevados, y cerca de 10 personas quedaron desempleadas.

Secuestros en los estacionamientos

En febrero de este año se conoció extraoficialmente que secuestraron al dueño de una zapatería y se lo llevaron hasta la Cota 905, mientras llevaban a cabo la negociación.

De acuerdo con denuncias de las víctimas, los hampones persiguen a sus víctimas en los estacionamientos y desde ahí piden las mercancías a los dueños o fijan los montos de las “vacunas”, de lo contrario, los secuestran y los trasladan a zonas cercanas, como Santa Eduvigis o Santa Ana, mientras llegan a un acuerdo con las bandas.

Trascendió que hace dos semanas secuestraron a un compañero, de origen asiático, para pedirle el nuevo monto de la extorsión. “Se lo llevaron para el cerro y luego de hacer las negociaciones, lo soltaron en la autopista del túnel La Planicie. Luego de eso, decidió cerrar su comercio”, comentó una de las víctimas.

Temen denunciar a los funcionarios que custodian la zona, ante las sospechas de que también estén involucrados con los delincuentes y su vida corra peligro.

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Fotos: Angeliana Escalona/Cheché Díaz


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