En la parroquia Coche cuando por fin llega el agua está turbia y con mal olor

La parroquia Coche, ubicada en el sur del municipio Libertador de Caracas, tiene un poco más de 58.000 habitantes, y superó los 300 contagios de COVID-19 solamente entre julio y agosto. Pese a esto, los vecinos están cansados y, aunque saben del riesgo de contagiarse de coronavirus al salir a protestar, quieren seguir exigiendo sus derechos.

Caracas. “Agua no apta para el consumo humano”, se leyó en una de las pancartas que sacaron los vecinos de la parroquia Coche en una protesta frente a la subestación de Hidrocapital este jueves 27 de agosto. Y es que cuando por fin sale algo por las tuberías, está turbia y con mal olor. De resto, simplemente no hay. 

Esta fue la segunda protesta en una semana. La pasada fue el lunes 24 de agosto, cuando pedían lo mismo. Que al menos puedan contar con el agua según lo establecido en el plan de regulación que tiene más de 16 años: se quita el agua los miércoles a las 9:00 a. m. y ponen el servicio el sábado a las 9:00 p. m. 

Los vecinos no es que estén de acuerdo con la regulación, pero es mejor que nada. Edward Ocariz, líder comunitario, comentó a Crónica.Uno que el motivo de la primera protesta fue que en 12 días solo recibieron 29 horas de agua, y ya venían de estar tres semanas sin el servicio. Cuando finalizó la primera manifestación les restablecieron el servicio como a las 3:00 p. m., y luego se lo volvieron a quitar hasta este jueves, que seguían esperando que llegara el agua. 

Se habló con un supervisor de Hidrocapital y dijo que se salía de sus manos. Eran órdenes de la gerencia de operaciones trancar la llave”, contó Ocariz. 

Según el último informe sobre los servicios públicos publicado por la ONG Cedice, el consumo de agua durante la cuarentena se ha incrementado 45 % debido a que la ciudadanía, que se mantiene en sus casas, requiere de mayores cantidades de agua, mejor calidad y cobertura del servicio. Esto quiere decir que se necesitan por lo menos 10 litros de agua diarios para cumplir con el lavado de manos como principal método de prevención de la COVID-19.

Ese requerimiento tan mínimo para asear las manos más bien parece demasiado para los habitantes de las residencias Delgado Chalbaud de Coche, que fueron las primeras en construirse en la parroquia, porque no tienen tanques de agua para al menos racionar entre los propietarios cuando les llega algo. Además, no se explican cómo ellos están sin el servicio mientras que las cisternas cargan agua todos los días en un llenadero muy cercano.

En medio de la escasez, algunos sectores de Coche recibieron durante estos días cisternas públicas que les permitió llenar dos tobos de agua por familia. Esto significa que una persona recogió solo 20 litros de agua para una familia, mientras que cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) apuntan que un solo individuo debe contar con 100 litros diarios para satisfacer sus necesidades de consumo e higiene.

En Caracas ya se habla de los pozos profundos como una solución para la falta de agua. Pero en la parroquia Coche los vecinos no tienen cómo pagar los altos montos en dólares para pensar en esa opción. También les cuesta mucho contratar una cisterna privada, que puede cobrar desde 60 dólares por un suministro que da para 10 minutos por apartamento. 

La parroquia Coche, ubicada en el sur del municipio Libertador de Caracas, tiene un poco más de 58.000 habitantes, y superó los 300 contagios de COVID-19 solamente entre julio y agosto. Está al lado de El Valle, la zona de la capital más afectada por el virus. Pese a esto, los vecinos están cansados, y aunque saben del riesgo de contagiarse de coronavirus al salir a protestar, quieren seguir exigiendo sus derechos.

Cansados de humillaciones salimos a protestar de manera pacífica como lo establece la Constitución en su artículo 68”, resaltó Ocariz.

La Encuesta sobre Condiciones de Vida en Venezuela (Encovi 2019-2020) refleja que 40 % del agua que ingresa al Distrito Capital se pierde por fugas o botes debido a la falta de mantenimiento y el deterioro de la red. Hace 20 años el sistema entregaba a la ciudad 20.000 litros por segundo. Hoy surten solo 11.000. El documento también señala que, de acuerdo con la percepción ciudadana, 5 % de la población tiene servicio corriente, pero 42 % padece ausencia de agua por más de una semana.

El método más usado por los venezolanos para tener acceso al agua es almacenarla en casa. El último informe del Observatorio Venezolano de Servicios Públicos (OVSP) reportó que 56,7 % de sus encuestados respondieron que tienen potes llenos en sus hogares para resolver la escasez por más de cinco días.

En las dos manifestaciones de los vecinos de Coche han estado presentes efectivos de la Policía Nacional Bolivariana que les piden que se retiren del lugar. Los habitantes no retroceden. Quieren ser escuchados. Se mantendrán protestando, pese a las medidas de flexibilización vigilada y la cuarentena en la ciudad.