El campocorto de los Yanquis de Nueva York inició su carrera en los equipos infantiles de la corporación, que cumplió recientemente 58 años como semillero de las Grandes Ligas.
Caracas. La lista de grandeligas salidos de la Corporación Criollitos de Venezuela va desde Omar Vizquel, pasa por Andrés Galarraga y entre los más jóvenes destaca el caraqueño Gleyber Torres, figura estelar de los Yanquis de Nueva York en la actualidad.
La entidad deportiva fundada el 20 de febrero de 1962 por el esfuerzo de José del Vecchio y el expelotero profesional Luis “Mono” Zuluaga recibe el apoyo de más de 115 ligas y unos 7000 equipos en todo el país para promover sus programas dirigidos a niños y jóvenes de entre 4 y 18 años de edad. Hoy en día, las ligas preescolares son el proyecto bandera de la organización, que tiene cerca de 100.000 niños inscritos y comprometidos con crecer en la disciplina.
Así dio sus primeros pasos Torres, quien a los 21 años de edad ya es una estrella en el béisbol de Grandes Ligas, y posee un talento que se pierde de vista. Prueba de ello es la temporada 2019, en la cual el también ficha de los Leones del Caracas conectó 38 cuadrangulares con los neoyorquinos.
Una figura desde pequeño
El caraqueño jugó con la divisa Cumbres de Curumo de la Liga Chucho Ramos, en la que coincidió con el hoy también ligamayorista Franklin Barreto, jugador de los Atléticos de Oakland. Gleyber siempre mostró su talento desde muy niño y llegó a representar y a coronarse con la selección de Miranda, como lo recuerda su padre, Eusebio Torres.
Algo que siempre vi en Gleyber desde pequeño era esa capacidad de mejorar año a año, no tenía techo. Eso me indicaba que venían cosas buenas en su futuro. Y todavía está aprendiendo”, expresó Eusebio Torres recientemente al ser consultado sobre el paso de su hijo por una divisa de Criollitos de Venezuela.
El propio campocorto pudo volver hace dos años a la que fue su casa en la pelota, el Polideportivo Chucho Ramos en San Luis, para dar una clínica de béisbol con jugadores del sistema Criollitos.
“Mis inicios fueron en este estadio, y cuando jugaba no tenía idea de adónde iba a llegar, pero ahora que soy grandeliga agradezco la oportunidad de poder brindarles mi consejo a los más pequeños”, señaló Gleyber después de la exhibición, en la que pudo constatar el inagotable talento que desarrolla una de las canteras más importantes del deporte venezolano.
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