En un mensaje a través de sus redes sociales, Henrique Capriles dejó clara su disposición a participar en la votación para renovar la Asamblea Nacional aunque no como candidato. Aseguró que dará la lucha por condiciones electorales. Aclaró que no se trata de legitimar a Maduro, a quien tildó de ‘dictador’ y ‘usurpador’, sino de preservar la AN y “salvar a Venezuela”.
Caracas. El dos veces ex candidato presidencial y todavía directivo de Primero Justicia, Henrique Capriles, acabó con la incertidumbre de los últimos días y anunció su disposición a participar (no como candidato) en la votación para elegir una nueva Asamblea Nacional, convocada por el CNE para el mes de diciembre.
Aunque inició su declaración con una crítica a quienes tergiversan los hechos o las palabras, en su intervención no fue preciso sino que recurrió a ejemplos, comparaciones con otros países, frases inacabadas y expresiones indirectas, en un contexto donde su posición significa —al menos en principio— la fractura de una dirigencia opositora que ya estaba bastante fragmentada y dispersa.
“Quiero anunciar a los venezolanos: nosotros no vamos a dejar a la gente sin opción. No vamos a dejar a sociedad civil sin opción. Aquí el país no va a tener a Maduro y alacranes, o a los opositores vestidos por Maduro y Maduro. Nosotros vamos a abrir camino, vamos a apoyar a mujeres y hombres que quieran abrir camino. No es un reparto, eso no nos interesa. Es que a esa rendija (la convocatoria a elecciones) le vamos a poner la mano, vamos a seguir abriendo caminos como se abrieron las rejas de unos presos. Vamos a abrir caminos para salvar a Venezuela de esta tragedia, la única forma de salvar a Venezuela de esta tragedia es abriendo caminos de política, de acuerdos”, dijo la noche de este miércoles en una transmisión en sus redes sociales.
El dirigente de Primero Justicia sostiene que la prioridad debe ser la contención de la pandemia y por eso cree que se debe considerar la suspensión de las elecciones parlamentarias.
Participar para no repetir errores de 2005
Henrique Capriles recordó que mientras la unidad y la estrategia opositoras permitieron la victoria en el año 2015, la abstención como estrategia en 2005 significó la pérdida del Parlamento durante el tiempo suficiente para que el chavismo de entonces cooptara todos los demás poderes públicos.
“El 5 de enero (de 2021) se termina (el mandato de) la Asamblea Nacional, en el entendido de que no tengamos una situación incontrolable con el coronavirus ¿Qué vamos a hacer? ¿nos tapamos los ojos, los oídos? ¿nos volvemos a dar con la misma piedra del 2005?”, interpeló.
Recalcó que lo que corresponde en el momento presente es luchar “para que las elecciones sean libres y democráticas y los votos sean contados”. Aunque aclaró que no es candidato y que está inhabilitado sostuvo que “el tema es cómo esa elección nos permite abrir caminos”.
En tal sentido, Henrique Capriles reconoció los atropellos cometidos por la administración de Nicolás Maduro contra los partidos, contra los dirigentes, violando las leyes “pero si la dictadura deja una rendija tenemos que meter la mano y luego el pie para que no se cierre la puerta”.
Pero a la vez consideró positivo que por primera vez en 16 años el Ejecutivo haya decidido invitar una misión de observación electoral internacional: “Ojalá haya tiempo, ojalá acepten. Hay unas alcabalas que hay que sortear. No es legitimar, no caigan en eso. La Constitución nos dice qué hacer. Tenemos que sortear. Nadie dice que con esto se va a resolver la crisis, pero si no luchamos nos vamos a arrepentir”.
Convocó a los venezolanos a movilizarse y luchar, aunque de momento no dio ninguna instrucción en particular al respecto: “No nos vamos a resignar. No le vamos a regalar a Maduro la Asamblea Nacional. Si pretende quitárnosla, nos la va a tener que quitar, que arrebatar. Y va a ser peor para él, pero que haga el esfuerzo. Por algo (Maduro) está como está, por no haber jugado a la democracia”.
Conversación con canciller de Turquía
Capriles confirmó que sí conversó con el canciller de Turquía, tal como el funcionario reveló el pasado primero de septiembre, pero aclaró que no se trató de un encuentro ni una negociación, sino de una conversación telefónica.
“Que me desmienta el embajador de Turquía: fue una llamada de teléfono del canciller turco que quería hablar conmigo”, afirmó. Explicó que el canciller turco había estado en Venezuela procedente de República Dominicana para la toma de posesión del nuevo presidente Luis Abinander (eso fue el 16 de agosto) donde habló con el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo; con la canciller de España y el funcionario quería escuchar su opinión.
Que me desmienta. Y si tengo que hablar con rusos, chinos, norteamericanos, con el que sea. Eso es lo que hacemos los políticos, eso es lo que uno tiene que hacer. Con noruegos, el que sea”.
Caso Requesens
El también exgobernador de Miranda se refirió a su papel en la liberación del diputado Juan Requesens, aunque no dio detalles de su intervención para los indultos a más de 100 presos y perseguidos políticos que se produjo posteriormente.
Sobre Requesens, dijo que trabajó en lograr su libertad desde diciembre de 2018 como una promesa personal a la familia del diputado, pero fue enfático en aclarar que no tuvo que dar nada a cambio.
“¿Quién sacaba a Juan de ahí? ¿Saben cuánto tiempo tenía yo pidiendo la libertad de Juan? Desde diciembre de 2018, no públicamente en actos, sino buscando, como político, por los caminos de la política a quienes tenían a Juan en esa cárcel. Requesens no fue liberado a cambio de nada, se los aclaro. Bueno aún no está libre, pero pronto lo estará. No fue un trueque. No destruyamos cuando se abren caminos, no los dinamitemos”, exhortó.
Mensaje a Guaidó
Finalmente, sin mencionarlo directamente, tuvo varias palabras y mensajes dirigidos al presidente (e) Juan Guaidó y a quienes le acompañan en el gobierno encargado, que, a juicio de Capriles, no es más que una fantasía porque “o se es gobierno o se es oposición pero no se puede ser las dos cosas al mismo tiempo”.
“Yo no estoy peleando con nadie. Yo no estoy pendiente de quitarle la silla a nadie, nunca me he bregado con guerra sucia. ¿Vamos a pelear por una botella vacía? ¿vamos a seguir viéndonos el ombligo o los pies? A la gente no le importa la pelea entre dirigentes o entre partidos. Yo creo en la unidad, en el encuentro, la reconciliación (pero) la unidad no es una consigna, tiene que tener un propósito, un plan, una estrategia. La unidad por nada es nada”, advirtió.
Recordó que desde enero de 2019 acompañó “de manera desprendida” la ruta propuesta por Guaidó, una ruta que calificó de “sorpresiva” porque nada era discutido previamente, sino que era revelado sobre la marcha.
En tal sentido, instó a la gente a pedir explicaciones sobre lo que pasó el 30 de abril de 2019: “Nadie le explicó eso”.
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