Todo tipo de desperdicios, desde una bolsa con la basura del baño, hasta piezas de carros y neveras, van a parar a la quebrada. Los vecinos están atentos cada vez que cae aunque sea una llovizna, porque el agua se les mete a sus casas
Charlie Barrera /@charliegiuliano
Caracas. “Por aquí nunca viene nadie. Lo que podemos arreglar lo hacemos nosotros mismos, entre los vecinos”. Este es el testimonio de Ingrid Bermúdez, habitante del barrio El Guanábano, ubicado en la parroquia Altagracia, al borde de la quebrada de Catuche que fue declarada de alto riesgo luego de la tragedia del año 1999.
Aproximadamente 200 familias habitan esa zona y aseguraron que no han recibido ayuda de ningún ente del Estado. El fallecido Robert Serra visitó la comunidad pero nunca obtuvieron ayuda de su parte. El último político que acudió al barrio prometiendo mejoras fue Antonio Ledezma, pero de él tampoco recibieron nada.
Pero lo que más mete miedo en la zona es la quebrada. Está embaulada justo hasta la zona que está debajo del puente, pero de allí hacia la parte más alta corre por su cuenta. “Cuando llueve estamos pendiente porque la quebrada crece y se nos mete a las casa”, comentó Bermúdez.
Monte, desechos domésticos de todo tipo, piezas de motores de carros y de nevera se ven obstruyendo el libre paso de las aguas.
Hace seis meses, según Guillermo Guevara, le metieron mano a un tramo de la quebrada. “Se limpió lo que está sin embaular. Sacamos de todo. Yo trabajé con los obreros y no pudimos entrar al encofrado. Está todo fracturado y en cualquier momento termina por quebrarse. Eso es un peligro latente porque ya se está llevando el frente de una casa y eso que no ha llovido con fuerza”, dijo.
“Hace tiempo vino una cuadrilla a limpiar la quebrada, pero lo que hicieron fue poner la basura a un lado. Sigue igual de sucia”, comentó otra vecina que no quiso revelar su nombre.
A causa de la contaminación que emana la quebrada, la insalubridad afecta a todos en la zona, principalmente a los niños. “Yo digo que mi hijo tendrá sarna porque se la pasa rascándose”, comentó Bermúdez.
Un poco de historia
La quebrada Catuche mide 7,4 kilómetros, nace en el cerro el Ávila y desemboca en el río Guaire. A su paso están asentadas varias comunidades pero las más grandes son Los Mecedores, El Guanábano y La Trilla. Después de la tragedia del año 1999 muchos de ahí quedaron damnificados.
En el caso del Guanábano algunos afectados se fueron a las residencias que construyeron en el sector Mecedores en la parroquia La Pastora, pero la gran mayoría volvió y construyó de nuevo en El Guanábano.
Esta quebrada (junto con otras 331 de la vertiente sur del Ávila) está incluida en el Proyecto de Saneamiento del Río Guaire anunciado por el expresidente Hugo Chávez, quien había ofrecido incluso que en 2014 se bañaría en sus aguas.
A la fecha la gente no le ha visto ni el rastro a las maquinarias. Dicen que luego de la tragedia del ’99 estuvieron en las cabeceras de la quebrada dragando las aguas, pero que en la zona poblada de la canalización se hizo mayor intervención, y “para muestra un botón la situación que vivimos en El Guanábano”, dijo Oscar Moscoso.
Fotos Angeliana Escalona
Lea también: En el barrio El Guanábano las casas están de mírame y no me toques
Participa en la conversación