“Me da dolor abrir la ventana de mi balcón y ver una pared de concreto de Traki”, lamenta vecina de El Cigarral

El 15 de septiembre pasado inauguraron la tienda Traki de El Cigarral, aunque la construcción no está terminada. En los tres pisos en funcionamiento aún hay obreros en plena labor, andamios y herramientas, todo entre el polvo y los demás residuos que deja los trabajos de construcción.

Caracas. El fondo de pantalla del celular de Minerva D’Elía es una fotografía que capturó desde el balcón de su apartamento en El Cigarral. La tomó un día de buen clima en el que el color verde del samán, que estaba plantado frente a su urbanización, se veía más vivo que nunca al igual que la grama que lo rodeaba. Pero algo cambió. Ahora el árbol no existe y el balcón de D’Elía tiene vista a una pared de concreto.

La urbanización donde vive D’Elía queda en el municipio El Hatillo, en el extremo este de Caracas. Esa pared de concreto que ve desde su balcón pertenece a la construcción de una gigantesca tienda Traki  –una empresa de tiendas por departamento– frente a su edificio y que perjudica también a otras residencias.

Me da dolor abrir la ventana de mi balcón y ver una pared de concreto de Traki, añadió D’Elía.

Vista antes de la construcción del Traki El Cigarral . Foto: Cortesía

Desde 2021, cuando los vecinos notaron que un grupo de obreros desmalezaron el terreno, se preguntaron quiénes eran esas personas y qué más iban a hacer allí. Días después llegó maquinaria pesada que estacionaron dentro del terreno.

La inauguración

Este 15 de septiembre la tienda Traki fue inaugurada, aunque la construcción aún no está terminada.

En los tres pisos en funcionamiento aún hay obreros en plena labor, andamios y herramientas, todo entre el polvo y los residuos que dejan las obras de construcción. Los pisos de la tienda aún son de cemento.

Foto: Ivanna Laura

Se espera que este centro comercial tenga otros comercios, además de la tienda Traki, pero hasta los momentos es el único que está inaugurado.

En el piso donde está la ropa de dama, muchas prendas están sucias.

Al amplio espacio que tiene cada piso le queda grande la cantidad de piezas que están a la venta.

Toda la mercancía luce desordenada. Estas imágenes se repiten en el piso de ropa de hombres y en el el área de artículos del hogar y comida.

En la salida del lado izquierdo los clientes tienen que pasar por pisos que están a oscuras. Son más de las 7:00 p. m. y los obreros todavía trabajan, mientras los usuarios hacen compras.

Estar dentro del Traki puede significar encontrarse a un soldador y que las chispas caigan hacía el piso de abajo o sobre algún usuario.

Foto: Ivanna Laura
La iluminación

La inauguración del Traki trajo consigo otro problema: la iluminación de los pisos que están activos y que está luz se proyecte hacia los balcones de los edificios que están frente.

Dada la excesiva cantidad de luz los vecinos se quejaron. Ese mismo día hubo cortes del servicio eléctrico en la zona rural de El Hatillo, algo que sucede con cierta regularidad en el municipio. Esto causó indignación entre los vecinos debido a que esta mega tienda luce muy bien iluminada, contrario a las zonas en las que viven a oscuras.

Foto: Ivanna Laura

Por las molestias que causaron las luces, la Policía Municipal de El Hatillo publicó a través de su cuenta en Twitter (ahora X) que la construcción debe apagar las luces al momento de cerrar.

No obstante, los vecinos no tienen claro el horario de la tienda. Este 18 de septiembre, pasadas las 9:00 p .m. las luces seguían encendidas, mientras que muchos comercios del municipio cierran antes del anochecer.

Foto: Ivanna Laura
La alcaldía

En 2021, tan pronto como se confirmó la construcción del edificio, residentes del sector se comunicaron con la alcaldía de El Hatillo. Según la versión de los habitantes, días después convocó a una asamblea en la que estuvo presente el alcalde, Elias Sayehg.

El alcalde nos explicó que una empresa privada iba a empezar a construir allí, pero que él no sabía de qué se trataba la construcción. Para ese momento ya todos decían que se trataba de Traki, pero el alcalde nunca lo confirmó. Sí dijo que habían dado permiso para hacer un estudio del terreno, explicó Karely Arteaga, vecina de El Cigarral.

Foto: Ivanna Laura

Pasado el tiempo, luego de que los vecinos empezaron a notar que la construcción avanzaba, volvieron a contactar a la alcaldía. Fue allí cuando Sayegh les confirmó que se trataba de un centro comercial Traki, que sería pequeño; solo dos sótanos y tres pisos, acorde a los centros comerciales que hay en la zona.

Si de centros comerciales se trata, cerca de El Cigarral están Galerías Los Naranjos y los Centros Comerciales Terrazas de La Lagunita, Los Geranios, La Boyera, Paseo El Hatillo y Cerro Verde.

“La construcción ya no iba a ser con las mismas dimensiones”

A mediados de junio de 2021, un grupo de vecinos acudió a ingeniería municipal a pedir información de la construcción, pues por lo que habían observado, la dimensión de la construcción no concordaba con lo que el alcalde había dicho.

No estaban respetando linderos ni la parte ambiental, esa construcción está sobre una quebrada, acusó Arteaga.

En esa visita se enteraron de la modificación de una ordenanza municipal que permitió aumentar el tamaño de la construcción

Nuestro Concejo Municipal, en fecha el 18 de junio del 2021, aprobó la Gaceta Municipal Ordinaria No. 150/2021, correspondiente a la reforma parcial de la ordenanza de adecuación de usos comerciales en el municipio El Hatillo de Miranda; la cual deroga la Gaceta Municipal No. 298/2016 de fecha 13-12.-2016, es una respuesta que dio Jacqueline Da Silva, ingeniera municipal, el pasado 30 de mayo a El Cooperante.

Ninguno de los vecinos fuimos consultados, sostuvo Arteaga.

Sin embargo, en la misma entrevista para El Cooperante, Da Silva aseguró que al menos 500 vecinos de la asociación de vecinos AsoCigarral y el Local de Planificación Pública (CLPP) fueron consultados.

Del mismo modo, el grupo de afectados con quienes conversó Crónica.Uno manifestó que la asociación de vecinos ha preferido guardar silencio sobre esta situación y que dicha consulta pública no se dio.

Se ha ido muchas veces a la alcaldía a pedir información y las respuestas son ambiguas o no responden lo que uno está preguntando, dijo Gonzalo Marín, vecino de El Cigarral.

Crónica.Uno intentó comunicarse con algún vocero de la alcaldía de El Hatillo. El medio recibió respuesta de José Luis Peralta, director de Medios y Comunicación de la alcaldía, quien explicó que el encargado de hablar sobre el tema es el alcalde. Hasta los momentos el medio sigue a la espera de concretar una entrevista con el funcionario.

En una entrevista para el programa al Toque de Diana en La Romántica 88.9 FM, este 19 de septiembre, Sayegh explicó que la zona en la que se construyó la tienda por departamentos es comercial desde el año 1975, por lo que aseveró que desde la Alcaldía El Hatillo no se cambió nada y es una obra privada en la que no tiene injerencia el gobierno municipal.

Los vecinos entrevistados por Crónica.Uno manifestaron estar conscientes de que dicho terreno era comercial. Sin embargo, su reclamo son las dimensiones de la construcción y los problemas que ha generado, como ruidos molestos, no respetar los linderos y ahora la iluminación excesiva.

El Samán

Al Samán lo arrancaron así de fácil. Ahí empezamos nosotros a molestarnos porque hicieron las cosas sin consultarnos. Como vecinos no nos involucraron en nada, dijo Mariela Loreto, vecina de El Cigarral.

El samán era un árbol que estaba ubicado donde ahora está la entrada del nuevo centro comercial. Fue talado en mayo de 2023, con la promesa de ser reubicado. Sin embargo, al momento de su remoción, el árbol estaba completamente podado, sin ninguna rama, lo que dificulta sus opciones de sobrevivencia.

La tala de este árbol causó indignación entre vecinos. Algunos expresaron sus opiniones al respecto a través de redes sociales. Con la construcción también desaparecieron otros árboles y un pequeño bosque de bambú que había en el terreno.

https://twitter.com/ernestormj/status/1660057224201359360

https://twitter.com/ernestormj/status/1659986947400511489

“No respetaron nada”

La entrada al estacionamiento del Traki está en la misma área de la entrada a la urbanización El Cigarral, conformada por 36 edificios y 2500 apartamentos. El centro comercial Traki tiene aproximadamente 80.000 mts2.

Ni siquiera eso respetaron, se suponía que iban a respetar que allí estaba la entrada de una urbanización, dijo Marín.

Los horarios de construcción tampoco los respetaron. Según la versión de los vecinos, era de lunes a viernes de 7:00 a. m. a 7:00 p. m. y los sábados de 8:00 a. m. a 4:00 p. m.

Pero ellos trabajan los feriados, trabajan los domingos, trabajan desde antes de las 7:00 a. m. y pasadas las 12:00 a. m. Son las 4:00 a. m. y escuchamos a los obreros martillar. Hay vecinos que les gritan que, por favor, se callen, dijo D’Elía.

La entrada de la urbanización muchas veces está congestionada. Como la construcción es en 100 % del terreno, no hay espacio para que los camiones o la maquinaria estén estacionados, los obreros terminan usando el espacio que se supone debería ser la acera de los peatones o la entrada hacía la urbanización.

Muchas veces ves a las personas caminando por el medio de la calle, o trancan la mitad de la calle y hacen una doble vía en el canal derecho de la vía, comentó D’Elía.

Foto: Cortesía - @LaKathe777
Foto: Cortesía – @LaKathe777

Nosotros no pretendemos que tumben el Traki, ¿Qué carrizo? ya está. Lo que nos preocupa es que continúen este tipo de construcciones en el municipio y que desmerecen muchísimo nuestra calidad de vida. El valor del metro cuadrado de la urbanización El Cigarral se vino al piso, dijo Marín.

Temen más construcciones

Los vecinos han escuchado de la construcción de unas canchas de pádel hacía Los Naranjos, otra obra que temen, perturbe la tranquilidad del municipio como denunciaron los vecinos de Baruta, por ejemplo.

El Traki vino a romper violentamente la tranquilidad de la urbanización, es la sensación que tiene este grupo de vecinos. Quienes dicen no sentir odio, sino indignación por no haber sido tomados en cuenta como vecinos de la urbanización.

— Como vecinos nos sentimos traicionados—, dijo Loreto.

— Se les olvida que nosotros somos electores—, añadió Marín.

Una de las peticiones que hacen los vecinos es instalar un control de acceso a la urbanización. Muchos temen que la llegada de visitantes del Traki de otras zonas traiga más caos y riesgos al lugar.

Dicha petición aún no ha sido atendida. También temen que la circulación de vehículos congestione aún más el tránsito de la avenida intercomunal El Hatillo, única vía de acceso a El Cigarral.

Las aceras de la urbanización se convirtieron en el baño de los obreros, que son más de 180. Las aceras huelen horrible. Yo salgo de mi casa a las 7:00 a. m. y me he encontrado a los obreros haciendo necesidades fisiológicas en las aceras de la urbanización o las aceras están llenas de envases plásticos que tiran al piso ¿Por qué yo tengo que ser sometida eso?, esto es una urbanización privada, dijo Loreto.


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