La pesca en la costa del municipio San Francisco apenas les alcanza para comer a los más de mil pescadores que han tenido que migrar a otros oficios. El petróleo fondeado en el Lago de Maracaibo sigue haciendo estragos en la economía de la zona.
Maracaibo. “Estas son las peores navidades que nos ha tocado pasar, no tenemos ni para comer porque lo poco que sacamos se va en gasolina para quitarle el petróleo que le queda pegado a las redes, es verdad que la mayoría de las orillas están limpias, pero el fondo del lago tiene más petróleo que agua”, dijo Ronny Figueroa, un pescador de El Bajo.
El Consejo de Pescadores del barrio San Benito, parroquia El Bajo del municipio San Francisco del estado Zulia, agrupa un poco más de mil pescadores que por décadas se han sustentado de las bondades del estuario, sin embargo, hoy su realidad es diferente.
El porcentaje de pesca se mantiene en una desmejora de 90 % porque hay especies que no hemos visto más, como el camarón y el cangrejo; los derrames de petróleo los han ahuyentado, han migrado y lo que estamos sacando es un poco de corvina y róbalo, pero muy poco”, dijo Jennifer Nava, vocera del Consejo de Pescadores del barrio San Benito.
Los pescadores de la zona refieren que hace un año, desde que se intensificaron las fugas de crudo en las costas del estado, han ido desapareciendo otras especies de pescado. Una de ellas es el cangrejo, el más preciado debido a la alta demanda que tiene para la compra por parte de las empresas que hacen vida en las orillas del estuario.
Sin embargo, hombres y mujeres hacen un esfuerzo cada día por mantener el arte que lleva el sustento a sus hogares, pero ahora en menor medida. “De siete días de la semana apenas dos puede que traigan pescado, de resto es pérdida. Lo más que traen es 50 kilos, no pasa de ahí. No es como antes que por salida se podían traer hasta 500 kilos y todos los botes pescaban, ahora las pérdidas son garrafales”.
La vocera recordó que esta situación no es nueva. “Tenemos cuatro años sin pescar como es debido, es difícil ver cómo los compañeros salen con toda la esperanza del mundo y no traen nada, solo pérdidas”.
Un pescador invierte a diario una media de 70 dólares que se dividen en gasolina, aceite de motor y alimentación. Las jornadas pueden ser de más de ocho horas debido a que cada vez deben navegar más lejos para tener una pesca libre de petróleo. La pérdida mensual ronda los 350 dólares por embarcación, aun si hay pesca.
Paños de agua tibia
Para mediados de noviembre la Comisión Presidencial para el Rescate, Conservación y Desarrollo Sostenible del Lago de Maracaibo informó en una nota de prensa que las labores de limpieza sumaban 1200 metros de costa totalmente saneados en el municipio San Francisco, parroquia El Bajo.
Néstor Reverol, vicepresidente sectorial de Obras Públicas y Servicios, posteó en su cuenta de Instagram un video con el siguiente mensaje:
“Un trabajo extraordinario ha cumplido la Comisión Presidencial para el Rescate del Lago, con el saneamiento del 100% de las playas, ubicadas en El Bajo, esencial la participación de todos los zulianos. ¡Lo prometimos y lo estamos cumpliendo: el rescate de nuestro ícono zuliano!”.
Se conoció que Pdvsa contrató una empresa que a su vez empleó a 180 personas entre pescadores y habitantes de la comunidad para hacer labores de saneamiento con un pago de 50 dólares semanales con jornadas de ocho horas al día, de lunes a viernes. Sin embargo, este lunes 18 de diciembre los trabajos cesaron, lo que trajo malestar a la comunidad no solo por la paralización, sino por el ingreso.
Aunque Pdvsa ha avanzado un porcentaje significativo en la limpieza de orillas, nosotros continuamos afectados porque todavía hay mucho petróleo fondeado que afecta a los pescadores, pues se siguen dañando las redes y las embarcaciones por la cantidad de petróleo que hay debajo”, replicó Jennifer Nava.
Quieren indemnización
El Consejo de Pescadores de El Bajo fue enfático en pedir a la estatal petrolera resarcir los daños que el crudo ha causado a su labor.
“Queremos que nos indemnicen porque las pérdidas que tenemos en estos últimos tres años son incalculables. No solo son las redes, son chinchorros, embarcaciones, motores, repuestos, gasolina, necesitamos una verdadera solución”, dijo la vocera.
Giovanny Urdaneta, pescador de la zona, dijo: “Pdvsa solo recoge solo lo que está en la orilla, aguas adentro no se ha hecho nada. Cada vez vamos más lejos, gastamos más e igual nos estamos muriendo de hambre”, criticó el padre de seis niños.
Según cifras del consejo de pescadores, varios de sus agremiados han decidido migrar a otras zonas de la costa oriental y Sur del Lago en busca de otros empleos como la albañilería. “Están buscando la manera de sobrevivir, aquí pasaremos unas navidades bien duras porque la cosa está bien fea, hace rato que las familias de los pescadores no comemos las tres veces al día”, dijo Nava.
La Academia de las Ciencias de Venezuela denunció que entre el año 2020 y 2021 se derramaron en el Lago de Maracaibo al menos 200.000 barriles de petróleo.
Este año una filtración de crudo dejó una mancha de 30 km2 en el estuario zuliano, reportó el investigador Eduardo Klein, además de la floración de algas marinas que aún permanece tiñendo de verde oscuro el lago más grande de América Latina.
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