Convite denuncia vulnerabilidad y situación de abandono de personas mayores

En el año 2018 fueron asesinadas 333 personas mayores. Los victimarios, en la mayoría de los casos, pertenecen al círculo cercano de las víctimas. Los hogares no son espacios seguros para las personas de la tercera edad y los ancianatos no pueden recibir a más personas por falta de recursos.

Caracas. “Mi hija me dijo que iba a una fiesta, me dejó acá, y de eso hace ya tres años”. Estas fueron las palabras de una mujer que actualmente vive en uno de los ancianatos monitoreados por Convite. Asociación civil que documenta y visibiliza la crítica situación que atraviesan las personas mayores en Venezuela.

La frase la compartió Luis Francisco Cabezas, director de la organización, durante la presentación de la tercera edición del informe de #VejezEnRiesgo y de los resultados del Monitoreo del Derecho a la Salud.

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Cabezas ratificó este 29 de agosto que la situación de las personas mayores requiere ser atendida con urgencia en el contexto de emergencia humanitaria compleja que se vive en Venezuela.

Los familiares llevan a los abuelos a los centros, los dejan ahí y dan información de contacto falsa. Los están dejando con un bolsito en la puerta de los ancianatos.

En los 93 ancianatos monitoreados por Convite en ocho ciudades de Venezuela (Área Metropolitana de Caracas, Valencia, Barquisimeto, Mérida, Maracaibo, Puerto La Cruz, Puerto Ordaz y Ciudad Bolívar) hay una población de 2676 personas (1677 mujeres y 999 hombres) a pesar de que existe una capacidad máxima instalada para 3949 personas. “Los ancianatos ya no están recibiendo a los abuelos principalmente por no poder darles comida”.

De esa población, 342 personas están sin pensión del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS); 79 tienen pensiones internacionales; 926 presentan un cuadro de movilidad reducida y 7 tienen prótesis auditivas.

333 personas mayores asesinadas en 2018

Sobre la situación de victimización de personas mayores, el director de Convite informó que en 2018 perdieron la vida en situaciones de violencia 333 adultos mayores. “Esta situación comenzó a hacerse evidente desde el 2016, y no es fácil la construcción de este índice, porque eso supone una recarga emocional muy fuerte”.

De esas 333 víctimas, 163 perdieron la vida en el marco de homicidios intencionales y 170 como parte de homicidios culposos (no intencionales).

“Las personas mayores no están seguras ni en sus propias casas porque muchas de estas muertes ocurren dentro del hogar”, afirmó Cabezas, quien además agregó que en la mayoría de los casos el victimario forma parte del círculo cercano a las víctimas. “En 11 de los casos el victimario era hijo de la víctima”.

Del total de personas mayores asesinadas, 233 eran hombres y 100 eran mujeres. Y 166 tenían entre 61 y 70 años. Las tres primeras causas de muerte fueron: arma de fuego (58 casos), arma blanca (37 casos) y asfixia mecánica (17 casos).

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Los estados más violentos para las personas mayores, según este informe, son Zulia, Aragua, AMC, Miranda, Vargas, Falcón, Carabobo y Trujillo.

Ancianatos no están en condiciones de recibir a las personas mayores

Para Alexander Monsalve, coordinador de Convite en Caracas, es necesario “activar planes para responder a esta situación de vulnerabilidad que viven los ancianos”.

En Caracas, detalló Monsalve, se evaluaron 60 ancianatos, en los que se constata que la situación económica impacta negativamente en su funcionamiento y reduce la capacidad que tienen de atender y de recibir a los mayores.

Los directores de estos centros no cierran sus puertas —explica— porque no encuentran qué hacer con los abuelos. Los ancianatos prácticamente se han convertido en “depósitos de adultos mayores”, pues los familiares los llevan y los dejan ahí. “¿Qué hacemos con ellos? ¿Los sacamos a la calle? nos dicen los directores”, comentó Monsalve.

Como parte de la acción humanitaria, Convite está haciendo entregas de medicinas e insumos a dos o tres centros semanalmente.

“Once centros en un mes, con un alcance de 382 adultos mayores, han sido atendidos y visitados por Convite. No es lo que soluciona el problema pero en algo ayuda”, afirmó.

Escasez de medicinas

Sobre el desabastecimiento de medicamentos o el alto costo de los mismos, Francelia Ruiz, del equipo de investigaciones de Convite, manifestó que la realidad venezolana ha originado mercados informales de medicinas, contrabando y proliferación de “servicios públicos” que terminan en estafas.

Informó que el Índice de Escasez de Medicamentos (IEM) está en aproximadamente 60 % para las enfermedades monitoreadas por Convite: diarrea, hipertensión, diabetes, infecciones respiratorias agudas, trastornos depresivos, trastornos de personalidad y trastornos neurológicos.

De manera desagregada, la última medición del IEM correspondiente a la primera semana de agosto, indica que el desabastecimiento se comporta de la siguiente manera:

  • Para la diabetes: 64,9 %
  • Para la hipertensión: 53,6 %
  • Para las Infecciones Respiratorias Agudas: 78,7 %
  • Para la diarrea: 53,6 %
  • Para la depresión: 76,9 %
  • Para las convulsiones: 82,2 %

“6 de cada 10 farmacias no tienen medicamentos para estas causas de morbilidad”, sostuvo Ruíz, quien explicó que el incremento en la disponibilidad de medicamentos para diabetes, hipertensión y diarrea —registrada por ejemplo en ciudades como Mérida y Maracaibo— no representa mayor acceso a ellos, pues el alto costo de los mismo impide su adquisición.

Las ciudades peor abastecidas en materia de medicamentos son Caracas, Barquisimeto y Puerto La Cruz, y las tres principales enfermedades para las que no se consiguen tratamientos son depresiones, infecciones respiratorias agudas y convulsiones.

El desabastecimiento de medicamentos —acotó Ruiz— es una violación del derecho humano a la salud. Denunció que el hecho de no tener los medicamentos en los anaqueles es una vulneración del derecho humano, pero también es una vulneración si aun estando el medicamento disponible la persona no puede adquirirlo por su alto costo.

Ruiz explicó que el monitoreo sobre la escasez de medicinas se llevó a cabo en 251 establecimientos farmacéuticos de ocho ciudades del país: Área Metropolitana de Caracas, Valencia, Barquisimeto, Mérida, Maracaibo, Puerto La Cruz, Puerto Ordaz y Ciudad Bolívar.

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Durante la actividad se presentó el documental Crónicas del olvido, con testimonios de abuelos de la casa hogar Madre Teresa de Calcuta.

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