Acuicultura en Sucre ha sido abandonada pese a que cuenta con infraestructura para potenciarla

Acuicultura

En otrora la Península de Araya y el municipio Bolívar figuraban como los polos de producción de peces de agua dulce, camarones y mejillones en el estado Sucre. Sin embargo, en la actualidad no existe voluntad en el sector oficial para reactivar la infraestructura instalada en dichas zonas.

Cumaná. Paralizada. Así se encuentran la acuicultura en el estado Sucre. Las granjas, ubicadas en los municipios Bolívar y Cruz Salmerón Acosta (Araya), para la cría de especies como: camarones, mejillones y macroalgas, en la actualidad se encuentran abandonadas.

Fernando Blanco, biólogo egresado del Instituto Oceanográfico de Venezuela (IOV), acuicultor y ambientalista, destacó la importancia del desarrollo de la actividad para aprovechar los recursos pesqueros de la entidad sin impactar el ambiente con la sobrepesca, porque el control de la producción se realiza en estanques con técnicas específicas y en grandes volúmenes.

Blanco sostiene que Sucre posee condiciones edafológicas y ecológicas factibles, además de un capital humano egresado de la Universidad de Oriente (UDO) e incluso personal del Instituto Nacional de Investigaciones Científicas (INIA), entre otras instituciones que tienen sus paquetes tecnológicos para desarrollar la acuicultura de forma fructífera.

No hay apoyo oficial para los acuicultores industriales o artesanales y resulta que con antelación en Sucre se instalaron granjas de camarones, se cultivaron peces de agua dulce, bivalvos (mejillones), tanto en el Golfo de Cariaco como en la costa norte de la Península de Araya, pero todas esas instalaciones están en el olvido, abandonadas y no hay fortalecimiento de la actividad”, sostuvo Blanco.

Sectores como Chiguana y Guacarapo destacaron en la Península de Araya por la producción de especies como el camarón litopenaeus vannamei, también se instalaron granjas en Taguapire y Peñas Negras junto a las de artemia salina, que se sumaron a las construcciones de otras zonas peninsulares como El Guamache y Punta de Escarceos.

Sin voluntad

Blanco destaca que profesionales y vecinos están dispuestos a trabajar. Sin embargo, no hay interés gubernamental por impulsar el sector ni por rescatar la infraestructura preexistente.

El experto citó casos en los que se ha impulsado la acuicultura, como la zona noroccidental del país en las que las granjas camaroneras y el cultivo de peces continentales han sido aprovechados en entidades como Falcón y Zulia.

En la isla de Margarita no solo se ha cultivado mejillón sino macroalgas marinas que serán aprovechadas como materia prima de alimentos concentrados para animales, la exportación de geles coloidales y otros productos.

Caballitos ornamentales

Oficialmente, ha sido confirmada la liberación de más de 1000 caballitos de mar en los manglares del parque nacional Mochima. Las especies criadas en cautiverio forman parte del proyecto ejecutado por los ministerios de Ecosocialismo y Ciencia y Tecnología, para garantizar la repoblación de la especie.

El Instituto de Estudios Avanzados (Idea), con sede en Mochima, cuenta con 10 tanques de 2000 litros para la reproducción de los ejemplares.

Blanco destacó que la cría de caballitos de mar es de vieja data para el desarrollo ornamental. Lamentó que la granja de laboratorio privado ubicado en Santa Fe para la producción de postlarvas de camarones, que luego eran engordadas en Anzoátegui, haya sido saqueada y no está operativa.


Participa en la conversación