El deterioro del terreno dejó a más de cinco personas sin vivienda. Los desagües de las quebradas que pasan por la zona crecen con cada lluvia y provocaron el colapso de una pantalla de concreto que protegía las construcciones.
Caracas. Lo próximo por ceder es el asfalto en un tramo de los primeros kilómetros de la autopista Caracas – La Guaira, una de las carreteras más transitadas del país. La vegetación y la cuneta a un costado de la vía ya no existen, debido a un derrumbe que ha empeorado progresivamente desde hace ocho meses y que pone en peligro el paso de los vehículos que bajan hacia La Guaira.
Hace cuatro meses, en junio pasado, el equipo de Crónica.Uno estuvo en el lugar y publicó la alerta que vecinos hicieron sobre un posible colapso de la autopista si el terreno seguía socavando.
Desde entonces, la erosión se ha acelerado por la falta de embaulado de las pequeñas torrenteras que ahí desembocan. En junio, cuando ya el país estaba en temporada de lluvia, la denuncia del deslizamiento también fue advertida por redes sociales.
Las lluvias de las últimas semanas de septiembre y primera semana de octubre hicieron inevitable el derrumbe de una pantalla de concreto que sostenía dos casas, en las cuales vivía Francisco Ozuna, de 73 años de edad, junto con las familias de dos de sus hijos.
Los más afectados
Del otro lado, en el sector Maracaibo Unido, en el kilómetro uno de la carretera vieja Caracas – La Guaira, la familia de Francisco Ozuna, ya sufrió las consecuencias del mal estado en el que está el terreno, que ha cedido con cada aumento de cauce de las aguas residuales que pasan cerca, tanto de la autopista, como de las casas afectadas.
Las viviendas quedaron desniveladas, luego de que la pantalla de concretó cedió y todos optaron por el desalojo. La pantalla tenía al menos 50 años de haber sido construida, según las cálculos de Ozuna, cuyo abuelo fue quien compró el terrero y luego le cedió la propiedad.
Por los momentos, una de las familias se fue a casa de otros parientes, pero Ingrid, una de las hijas de Francisco, se quedó con su papá afuera de la casa, junto a su esposo y una de sus hijas.
En una parte del terreno Francisco improvisó un techo y bajo ese espacio ubicaron todos sus corotos: un closet, las camas, la cocina y demás pertenencias.
“Estamos aquí esperando que nos ayuden”, expresó Ingrid.
Los afectados tienen luz eléctrica y agua potable gracias a conexiones que hizo Francisco con las tuberías y el cableado que tenían las casas. El dinero no sobra para Francisco y sus familiares. La venta de cervezas es el mayor ingreso económico de Francisco, negocio que mantiene a pesar de haber perdido su casa.
Nosotros nos negamos a ir a un refugio. Si nos van a ayudar, que sea para reconstruir nuestras casas, pero de aquí no nos vamos a mover”, añadió Francisco.
El colapso del terreno
El miércoles, 5 de octubre, cayó parte de la vegetación y de la cuneta de la autopista. Tras el derrumbe, varios habitantes de la zona cercaron la parte afectada con cinta amarilla.
Mayra Trujillo, vecina de Maracaibo Unido, explicó que el domingo, 9 de octubre, funcionarios de la gobernación de La Guaira inspeccionaron la falla de borde.
Mayra aseguró que desde hace dos años dicho deslizamiento ha dado señales de su profundización. En ese momento, después de divulgada la denuncia de los vecinos, funcionarios de protección civil e ingenieros estuvieron en el lugar y llevaron maquinaria para trabajar en el terreno. Sin embargo, no hubo solución.
Cuando llueve el agua crece muchísimo. Eso es horrible”, explicó Mayra.
Francisco contó que hace ocho años, durante los trabajos de construcción del túnel que uniría la avenida Boyacá (Cota Mil) con la autopista Caracas – La Guaira, estaba planteado el embaulamiento de las aguas de las quebradas que pasan por la zona. Esa también fue una promesa incumplida.
En junio de 2022 también denunció que un botadero de escombros improvisado, desde un estacionamiento cercano al terreno, obstaculizaba el paso de las aguas. Desde el estacionamiento negaron que esto fuera parte del problema, como declararon entonces a Crónica.Uno.
La construcción de este túnel comenzó en el 2012 y hasta la fecha sigue inconclusa. En 2015, el mandatario Nicolás Maduro habló de reactivar la obra, pero solo quedó en palabras.
Debido al abandono de la obra, en 2019, la zona empezó a ser usada por los habitantes de la parroquia San José para abastecerse de agua, a pesar de estar contaminadas, por las prolongadas fallas del servicio en Caracas.
El papel de las entidades públicas
Este martes, 11 de octubre, una cuadrilla de limpieza, con obreros de la dirección regional del Ministerio de Obras Públicas, limpió el área.
Además, desplegaron una lona de plástico sobre la zona afectada, esto con el fin de que el agua no filtre hacía la parte alta del terreno, por donde está la autopista. También atravesaron muros de defensa.
Según Abigail Ojeda, encargada de coordinar la limpieza de la zona, ya hay ingenieros del Ministerio de Obras Públicas encargados de hacer un estudio del suelo para buscar una solución al deslizamiento.
Aseguró que no se ha planteado impedir el paso de los vehículos. En la zona también hay presencia de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana.
Todavía no hay fecha para una solución, pero ya están trabajando en eso. El encargado es Alirio Antequera (director regional del Ministerio de Obras Públicas)”, dijo la funcionaria.
#TejeríasRenacerá Vialidad
Estamos atendiendo de manera preventiva lo que será el proyecto de abordaje de falla de borde en el km 0 de la autopista Caracas-La Guaira.
Tal como lo ha orientado el Min. @GRaulparedes trabajar en la Vialidad, para beneficio del Pueblo. pic.twitter.com/tTMfIm0qsB
— Ing. Alirio Antequera (@AlirioAntequera) October 11, 2022
La importancia de la autopista Caracas – La Guaira
La autopista Caracas – La Guaira es la entrada principal a la ciudad capital desde el Litoral Central. Por allí pasan quienes vienen y van al Aeropuerto Nacional e Internacional Simón Bolívar, en Maiquetía, el aeropuerto más importante del país. Es la ruta de los camiones de carga que suben con mercancía desde el puerto de La Guaira.
Esta autopista es de uso constante para la población que vive en La Guaira y trabaja o estudia en Caracas. Sin mencionar que cada fin de semana es uno de los destinos turísticos más visitados por los caraqueños.
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