Habitantes de la zona norte de Barcelona han presenciado en los últimos días la proliferación de boas constrictoras o tragavenados y caimanes en calles y residencias de la ciudad. Autoridades de Protección Civil instaron a la ciudadanía a no matar a estos animales que forman parte del ecosistema; en caso de avistamiento, deben llamar de forma inmediata al 911.
Barcelona. El desborde del río Neverí ocurrido a principios de mes en la ciudad de Barcelona no solo trajo consigo la tragedia para más de 1500 familias que resultaron afectadas por las inundaciones sufridas en las zonas urbana y rural de la capital anzoatiguense. Transcurrido casi un mes, ahora la proliferación de animales como serpientes y caimanes se ha convertido en una preocupación para los ciudadanos.
Desde el primer día en que las aguas del Neverí invadieron las viviendas de casas y conjuntos residenciales, habitantes reportaron avistamientos de serpientes y caimanes en zonas como el barrio Fernández Padilla, Nueva Barcelona y la avenida Centurión, ahora las boas constrictoras o mejor conocidas como tragavenados copan la escena.
La tarde del pasado miércoles, funcionarios de Protección Civil Urbaneja y bomberos del estado atendieron el llamado de los vecinos, quienes reportaron la presencia de una tragavenado en la avenida Principal de Lechería, un caimán cerca del canal de aguas pluviales situado en la avenida Camejo Octavio y un ataque de abejas africanas en las inmediaciones del sector El Peñonal.
Según el reporte del alcalde Manuel Ferreira, varias personas resultaron afectadas por la picadura de las abejas y tanto la boa constrictora como el caimán fueron capturados y liberados en su hábitat natural.
La mañana del jueves, vecinos de las residencias Río, cercanas a la residencia del gobernador, también en Barcelona, vivieron momentos de angustia, cuando una boa constrictora, de aproximadamente dos metros de largo, se paseó a sus anchas por toda la residencia, e incluso se atrevió a subir varios pisos.
Sin saber su grado de toxicidad, vecinos estaban prestos a deshacerse de la serpiente, sin embargo, contaron a Cronica.Uno que otros decidieron atraparla y llamar a Protección Civil para que determinara el destino final del animalito.
Esto nos preocupa porque en estas residencias viven muchas personas de la tercera edad, las residencias están cerca del paso del río, se han metido varias e incluso han llegado a meterse en los apartamentos. Menos mal que llegó Protección Civil y se la llevó, esperemos que las autoridades estén más pendientes de este asunto”, sostuvo una vecina.
William Guacarán, director de PC Barcelona, llamó a la ciudadanía a mantener la calma, e indicó que esta proliferación es producto de lo que ocurrió con el río Neverí.
Lo primero que deben hacer los ciudadanos es llamar al 911, y ellos enviarán al personal especializado para atender la eventualidad. Estas serpientes no son venenosas y son parte del ecosistema, por eso los ciudadanos deben mantener la calma y no matarlas”, sostuvo Guacarán.
El funcionario indicó que los animales, una vez capturados, son liberados en la zona rural de la ciudad capital en un hábitat controlado, lejos de viviendas y áreas pobladas.
Participa en la conversación