En el Distrito Capital se registraron, al menos, siete bajones de luz, este miércoles, 13 de septiembre, lo que ocasionó que el Metro de Caracas y Los Teques, y el ferrocarril de los Valles del Tuy, suspendieran el servicio. Las paradas de transporte urbano lucieron con largas colas.
Caracas. Hasta las 6:00 p. m. de este miércoles, 13 de septiembre, se contaron, al menos, siete fallas del servicio eléctrico que afectaron a 14 estados del país y al Distrito Capital.
Algunos de los estados afectados por los bajones de luz fueron Aragua, Miranda, Carabobo, Vargas, Lara, Trujillo, Zulia, Mérida, Falcón, Anzoátegui, Bolívar, Sucre y Nueva Esparta, más el Distrito Capital.
A las 4:35 p. m. el Metro de Caracas informó la suspensión del servicio debido a los bajones de luz. Lo mismo ocurrió con el ferrocarril de los Valles del Tuy y el Metro de Los Teques.
Ya desde la mañana del miércoles el transporte subterráneo en Caracas presentaba retrasos, una falla habitual del sistema. A esto se sumó el aumento de las tarifas del pasaje urbano en todas las rutas.
Debido a la paralización del Metro y del ferrocarril, las paradas de camioneticas desde la avenida Urdaneta hasta la avenida Francisco de Miranda lucieron llenas de pasajeros a la espera de transporte, principalmente en La Candelaria, Chacaíto, Altamira, Chacao y La California.
Sin una hora prevista para el reinicio de las operaciones del Metro y ante la falta de opciones de traslado, los usuarios optaron por caminar. Algunos se quejaron de la falta de medidas de contingencia de la empresa estatal.
Por redes sociales reportaron que en La Rinconada los conductores, presuntamente, cobraron hasta cinco dólares de pasaje.
Por otra parte, Crónica.Uno conoció que en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) desalojaron al personal docente y administrativo por medidas de prevención.
Tarde con racionamiento en Margarita
Cerca del mediodía del miércoles, una serie de bajones antecedieron un apagón como consecuencia de una falla presentada en la Línea de Transmisión Casanay-Chacopata, que afecta el cable submarino.
A través de un comunicado, la empresa Coropoelec anunció que mientras detectaran la avería, se restringiría el el servicio eléctrico que aporta la planta termoeléctrica Juan Bautista Arismendi, en bloques, en los distintos municipios del estado Nueva Esparta.
Hoteles, centros comerciales, centros médicos y hasta el aeropuerto Santiago Mariño, permanecieron con restricciones en los servicios que prestan.
Temor a nuevo megapagón
El temor a que ocurra un nuevo megapagón se percibió en redes sociales, en el transporte público y en las calles de Caracas por igual, tras los bajones de este miércoles. La falla masiva del 7 de marzo de 2019 mantuvo sin luz al país por más de 100 horas consecutivas y fue el inicio de un problema que sigue sin resolverse.
A lo largo de los 12 meses siguientes al megapagón, hubo al menos 11 interrupciones masivas del servicio que dejaron sin energía hasta por más de 20 horas a 10 estados del país. Lejos de mejorar las condiciones del sistema eléctrico, la generación cayó de 14.000 a 4000 MW.
El afán del Gobierno por mantener a oscuras las regiones a expensas de Caracas, sin embargo, no evitó que continuaran los bajones y los apagones en algunas zonas de la capital del país. Dos años después del megapagón, y con la población recién ajustándose a la nueva normalidad por la pandemia de COVID-19, la inestabilidad del servicio indicaba que la crisis eléctrica estaba lejos de solucionarse.
La falta de insumos, personal calificado y capacidad de respuesta también hicieron lo suyo en la continuación de los bajones y apagones a lo largo de 2022. En agosto de ese año, se anunciaron contratos con la empresa alemana Siemens para reconstruir las centrales termoeléctricas, pero quedó en veremos junto con otros cinco planes de recuperación prometidos e incumplidos en los últimos 20 años.
A finales de mayo de este año, el ingeniero y consultor José Aguilar explicó a Crónica.Uno que los problemas en la transmisión de energía eléctrica seguían agravándose y amenazaban con “sitiar” a Caracas, que desde el apagón de marzo de 2019 ha sido tratada como prioridad por las autoridades.
De acuerdo con el especialista, Venezuela produce cerca de 30 % de la capacidad instalada de generación de 36.000 vatios y 80 % de la energía que va a Caracas depende de la hidroeléctrica del Guri, en el estado Bolívar, pero más allá de si se genera o no, el problema sigue siendo las dificultades que hay para transmitir la energía.
Actualmente, según el monitoreo de servicios del Centro para la Divulgación del Conocimiento Económico (Cedice), al menos cinco veces por día se registra una falla o bajón de energía eléctrica y cerca de dos de cada tres fallas ocurren en la región occidental del país.
De acuerdo con Cedice, en Mérida y Zulia se promedia alrededor de 15 horas al día sin servicio eléctrico y solo nueve entidades promedian menos de 10 horas diarias sin electricidad.
Con información de Dexcy Guédez y Jesús Barreto Armas
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