Clima 21: “Contaminación por mercurio ocupa toda la Amazonía venezolana”

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A propósito de la XXIII edición del foro Guayana Sustentable, el coordinador general de Clima 21, Alejandro Álvarez, expuso datos sobre afectaciones en la salud por contaminación por mercurio, en especial en las zonas mineras del estado Bolívar

Puerto Ordaz. El problema de la contaminación por mercurio en Venezuela, en especial la región Guayana, es histórico. Sin embargo, la incidencia creció a partir del auge de la minería con la creación del Arco Minero del Orinoco. Esto trajo consigo una actividad minera indiscriminada en la que, necesariamente, se usa el mercurio con las exposiciones que implica en el aire y las aguas, así como la producción de metilmercurio.

Durante la XXIII edición del foro Guayana Sustentable, que abre espacios para el diagnóstico de oportunidades, amenazas y desafíos para hacer de esta región sostenible en el tiempo, el coordinador general de la ONG Clima 21, Alejandro Álvarez, expuso datos sobre la contaminación por mercurio en el sur de Bolívar.

Amazonía venezolana

Una persona puede estar expuesta a los vapores generados por el mercurio, o por el consumo de peces contaminados por esta sustancia. “En este momento se puede considerar que la contaminación por mercurio ocupa toda la Amazonía venezolana”, aseguró Álvarez.

Precisó que para finales de los noventa y primeros años del 2000, se determinó que mineros, mujeres y niños en El Callao y en el Bajo Carabín tenían niveles de mercurio en su cuerpo muy por encima de los valores de referencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS). 

Los datos que sustentan esta afirmación son resultados de investigaciones de Naciones Unidas y universidades en Guayana, así como los que realiza Clima 21.

Uno de ellos es que en El Callao, por ejemplo, detectaron que 38 % de los niños entre 6 y 13 años presentaron muy altos niveles de mercurio. Incluso, el polvo y aire de las escuelas contienen mercurio.

“A pesar del enorme tamaño del Arco Minero, que es el 12,12 % del territorio nacional, distintos trabajos que estamos realizando, así como otras organizaciones, indican que el efecto de la minería en este momento está ocupando aproximadamente el 40 % de todo el territorio nacional”, expuso Álvarez. 

Detalló que la zona más grave por esta situación es entre El Callao y el kilómetro 88 del municipio Sifontes.

Es donde las concentraciones de mercurio, además, se han medido desde hace más de 30 años. Y donde hay contaminación por mercurio desde hace más de 100 años”.

Mapa contaminación mercurial Bolívar
Aunque Bolívar es el principal estado vulnerable por contaminación por mercurio, estudios de Clima 21 indican que el efecto de la minería ocupa aproximadamente el 40 % de todo el territorio nacional. Foto Jhoalys Siverio
Grupos vulnerables

El hecho de que la contaminación por mercurio se extienda a otras zonas alejadas de la minería, advierte Álvarez, tiene que ver con la contaminación de las aguas y, en consecuencia, de los peces. Algunas especies son migrantes y podrían llevar mercurio en su cuerpo y contaminar a quienes lo consuman, tanto humanos como otros peces.

En 2011, una investigación realizada en el medio Caura determinó que 92 % de las mujeres indígenas presentaron niveles de mercurio por encima de los considerados como “seguros”. En El Callao, una medición de hace tres años, detectó que el 37,1 % de las mujeres que trabajan en la mina superaron el umbral de una parte por millón (ppm), que es lo que considera la OMS como un elemento “seguro”.

Allí también se midieron las concentraciones de mercurio en el cuerpo de mineros entre las más altas del mundo.

Asimismo, “toda la población de la región, incluyendo las personas que no viven en zonas mineras, están en riesgo de contaminarse por el mercurio debido al consumo de especies de peces que están contaminadas. En particular, las más graves de todas ellas son las especies de peces carnívoros que llegan a grandes tamaños”.

Algunos de los efectos neurológicos tempranos son temblores, insomnio, cefaleas y dolor de cabeza, pérdida de la memoria, pérdida de funciones cognitivas. Los síntomas son difíciles de apreciar en las primeras etapas.

A medida que aumenta la concentración de mercurio en el cuerpo, pueden aparecer alteraciones neuromusculares, incluyendo la muerte. Incluso hay efectos en el feto. 

Contaminación por mercurio
Datos de Clima 21 indican que mineros y grupos vulnerables en zonas mineras de Bolívar tienen en sus cuerpos cantidades significativas de mercurio. Foto cortesía Correo del Caroní, William Urdaneta
Los efectos en Guayana

Estudios empíricos sugieren que la contaminación por metilmercurio, un derivado del mercurio, sea una de las causas por las que el estado Bolívar sea el de más incidencia de nacimientos con labio y paladar hendido. Así lo señala Marianella Fuenmayor, presidenta de la fundación Guayana Sonríe. Misma hipótesis sucede con el autismo, aunque en ambos casos las causas son multifactoriales,

Y es que para 2019, testimonios como el de Isaura Alvarado y otras madres de niños y niñas con labio y/o paladar hendido, parecían secundar esa hipótesis.

En la mayoría de los casos que ese año atendió la fundación Guayana Sonríe en su jornada anual de operaciones, madres admitieron no haber consumido ácido fólico durante todo el embarazo. Pero también ellas o sus parejas estuvieron en las minas o vivían en municipios mineros como El Callao, Sifontes y Gran Sabana.

“Tengo años viviendo en Santa Elena de Uairén (Gran Sabana). Yo trabajo del comercio informal, pero mi esposo sí ha trabajado en las minas. Cuando mi hija nació con labio y paladar hendido, me dijeron que pudo ser por la contaminación que hay allí. También que yo consumí ácido fólico desde el tercer mes de embarazo. Pero no fui regular porque a veces no tenía dinero para comprar o no se conseguía. Fue en esa época donde los medicamentos los revendían o tenías que traer de Brasil”, relató.

Sin políticas públicas

A la fecha, no hay una política pública que evalúe los daños de la contaminación por mercurio, que atienda a los afectados, así como sanear y restaurar los ecosistemas. 

Aunque desde 2016 se prohibió mediante decreto la importación, comercialización y uso del mercurio en la explotación del oro, en la práctica esto no se cumple.

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