El abogado Joel García informó que el juez que lleva la causa ordenó el pase a juicio del estudiante de la UCV, este lunes, 20 de noviembre. John Álvarez se encuentra detenido desde el 30 de agosto.
Caracas. La dinámica familiar ha cambiado totalmente para los Álvarez: todos están abocados al cuidado de John, desde su detención, el 30 de agosto. Esto también les ha afectado en el área laboral, pues la familia tiene un negocio en San Martín, pero desde hace 82 días está cerrado para dedicarse al cuidado del estudiante. También, tuvieron que cerrar la bodega que tienen cerca de su vivienda. Ahora la familia consumió todos sus ahorros.
John Álvarez padre denunció que tras la detención de su hijo han sufrido persecución por parte de presuntos funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) vestidos de civil. Contó que rutinariamente hacen recorridos por la zona de residencia de la familia, en la parroquia San Juan, y se quedan estacionados fuera de su casa, en vehículos sin placa, durante horas.
Se ha hecho frecuente que los efectivos le tomen fotos a cualquier miembro de la familia y los graben en su cotidianidad y en cualquier lugar público, para “generar temor y amedrentar”, según el padre del detenido.
Lo mismo ocurrió este lunes, 20 de noviembre, mientras se reunieron en una protesta pacífica a las afueras del Palacio de Justicia durante la audiencia preliminar del estudiante ucevista. Varios funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y personas vestidas de civil se acercaron a tomarles fotos y grabarlos, incluyendo a los periodistas que estuvieron presentes.
El pasado 30 de octubre, la esposa de John Álvarez, Eleyn Echarry, quien también es estudiante, denunció a través de las redes sociales que en su primer día de clases en la UCV la interceptaron varios funcionarios de la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET) y la amenazaron: “sigues tú en la lista por ser la esposa del terrorista John Álvarez”.
https://twitter.com/EleynE_2602/status/1719139762957881492?s=20
Mencionó que constantemente ve a funcionarios de la PNB vestidos de civil dentro de la UCV y le toman fotos.
Familias y allegados piden que no les causen más sufrimiento con la detención de John. “Nos están matando con esa detención porque nosotros también estamos detenidos con él”, expresó el padre del estudiante.
John Álvarez pasa a juicio
Al final de la tarde, el abogado Joel García informó que el juez que lleva la causa aprobó el escrito acusatorio en contra del estudiante; admitió todos los órganos de prueba y ordenó el pase a jucio oral y público, y John seguirá preso en el mismo lugar de reclusión, en la PNB de La Yaguara.
Además, enfatizó que el escrito es una amplia demostración de que el Estado de derecho es “inexistente” en Venezuela.
“Es una brula lo que se dice ahí (en el escrito de acusación). Dice que John cometió unos de delitos de conspiración y de asociación que el Ministerio Público ni siquiera supo explicar en la audiencia(…)Estas horas de discusión y de debate no nos sirvieron de nada, es como si no hubiésemos hablado porque el juez declaró sin lugar la excepciones expuestas por la defensa y le dio toda la razon al Ministerio Público”, acotó.
Defensa objetará participación de la Procuraduría en el caso
Por otro lado, García explicó que la pretensión de la Procuraduría de la República de ser parte del caso del estudiante detenido, John Álvarez, “es una táctica dilatoria para seguir extendiendo una prisión preventiva que se está convirtiendo en una pena anticipada”.
Alegó que la responsabilidad de la Procuraduría es únicamente representar los intereses patrimoniales del Estado.
“Aquí no está en juego ningún patrimonio del Estado, por lo tanto no tienen que estar presente”.
Recordó que en el caso de los detenidos por el supuesto intento de magnicidio frustrado, del 4 de agosto de 2018, la Procuraduría también quiso ser partícipe.
Sin embargo, mencionó que esa oportunidad la defensa objetó y sacaron a la Procuraduría del proceso. “Igualmente tiene que pasar con el caso de John porque no tiene nada que buscar”.
Resaltó que el Ministerio Público no cuenta con ningún medio de convicción para inculpar al joven.
La mañana de este lunes, 20 de noviembre, familiares y defensores de derechos humanos convocaron a una protesta pacífica, motivada por la audiencia preliminar del estudiante, que empezó con tres horas de retraso.
Sobre este aspecto, García resaltó que estos retrasos suelen suceder porque las autoridades “juegan al desgaste, al cansancio y a que los medios de comunicación no estén presentes”.
Detención arbitraria
Al estudiante John Álvarez, de 24 años de edad, lo detuvieron arbitrariamente el 30 de agosto de 2023 y lo relacionan con el caso de los seis sindicalistas que fueron condenados a 16 años de prisión.
Al joven se lo acusan de los presuntos delitos de conspiración y asociación para delinquir.
Cabe destacar que en menos de una semana de su detención, el estudiante denunció durante su audiencia de presentación que fue víctima de torturas por parte de funcionarios de la DAET de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), tras negarse a incrimar a dos personas.
John Álvarez es estudiante de Antropología en la Universidad Central de Venezuela (UCV) y es miembro de la Comisión de Usuarios del comedor de esta casa de estudios. Está por finalizar su carrera en Derecho en la Universidad Católica Santa Rosa (Ucsar). Además, también es percusionista inactivo del Sistema Nacional de Orquestas de Venezuela y fue secretario general de la Juventud de Bandera Roja, un partido político comunista, socialista y marxista-leninista.
Sin investigación por las torturas
Las torturas dejaron algunas secuelas físicas en el estudiante, como la pérdida de 40 % de la visión del ojo izquierdo, contó su padre John Álvarez.
Desconocen si el diagnóstico empeoró ya que no ha tenido chequeos médicos desde que lo vieron en el servicio forense de la Fiscalía, el 26 de septiembre pasado.
También le diagnosticaron una inflamación en el riñón izquierdo y una lesión muscular que va desde el glúteo derecho hasta la rodilla.
El padre del estudiante y Eleyn Echarry, esposa del joven, informaron que aún no han investigado las torturas que padeció John, quien además tiene una fuerte afección respiratoria y una tos “muy fuerte que casi no lo deja respirar”.
“Ya le robaron más de 80 días de su vida. Le están robando su futuro, momentos con su familia, y lo mínimo que podrían hacer las autoridades es investigar las cosas que ellos mismos le hicieron, porque no pueden quedar impunes todas esas torturas”, dijo Echarry.
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