El consumo interno de gasolina se estima en 30.000 barriles diarios debido a las restricciones de movilidad por la pandemia, a la paralización del parque automotor y también a los problemas de distribución, que empeora en las regiones. Pese a que los ingresos del Estado han caído más de 90 % desde 2013, el Gobierno destinó el año pasado $564 millones a subsidios de los combustibles.
Caracas. Desde marzo del año pasado la falta de gasolina se agudizó en Venezuela. El Gobierno asegura que la caída de la producción se debe a las sanciones de Estados Unidos, sin embargo, el deterioro de la industria comenzó antes de enero de 2019, cuando la administración de Trump aplicó la medida. El 2020 transcurrió con largas colas y protestas en distintos estados por las fallas en el servicio, pese a que la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) logró levantar su producción a partir de junio.
De acuerdo con cifras entregadas el 12 de enero por el mandatario Nicolás Maduro en su Memoria y Cuenta, entre enero y diciembre de 2020 la nación pasó de producir alrededor de 7000 barriles de gasolina al día a 51.000 barriles diarios (bd), un aumento de 628,57 %. Maduro dijo que del 1° de enero al 31 de mayo la producción de combustible se ubicó en un millón de barriles; mientras que del 1° de junio al 31 de diciembre, en 11 millones bd.
Las refinerías operaron el año pasado con diversos problemas, lo que ocasionó que fueran paradas varias veces, según reportes de trabajadores. Una fuente ligada al sector, que prefirió mantener su nombre en reserva, indica que en el segundo semestre del año Cardón fue la que más logró producir, con unos 45.000 barriles al día, y llegó a 100.000 bd en diciembre; pero El Palito sigue sin recuperarse y Amuay estuvo detenida casi todo noviembre.
La refinería de Amuay ha tenido distintos problemas para operar, sin embargo, lograron reactivarla a finales de noviembre, pero solo para destilación debido a que el resto de las unidades están fuera de funcionamiento, asegura la fuente. La única que muestra mejora es Cardón. Mientras que El Palito se paró todo diciembre para evitar derrames de crudo u otras fallas.
La refinería Puerto la Cruz está parada desde enero 2019. Pese a que intentaron reactivarla en diciembre de ese año –por pocos días–, fue paralizada a principios de enero de 2020 y en noviembre la encendieron con una carga de 50.000 barriles diarios, pero solo para mantenimiento, pues actualmente no produce ningún tipo de producto.
El consumo interno de gasolina se estima en 30.000 barriles diarios debido a las restricciones de movilidad por la pandemia, a la paralización del parque automotor y también a los problemas de distribución, que empeora en las regiones.
La producción de crudo también está contraída. Hoy Venezuela es el sexto exportador petrolero de la región y su producción se remonta a la de 1930, recuerda el economista Francisco Monaldi. En diciembre Pdvsa apenas produjo 431.000 barriles diarios, según fuentes secundarias de la Opep, y cerró con una producción en 2020 de 500.000 barriles.
Pese a que los ingresos del Estado han caído más de 90 % desde 2013, el Gobierno destinó el año pasado $564 millones a subsidios de los combustibles. Maduro dijo que $430 millones se fueron en subsidio directo para la gasolina de transporte particular y $134 millones en gasolina para el transporte público.
Maduro reconoció que la producción petrolera cayó 69 % entre 2014 y 2019 y que la pérdida es de 2.153.000 barriles de crudo al día. Con una producción actual de poco más de 400.000 bd el mandatario aspira a que este 2021 la industria llegue a producir 1.500.000 barriles diarios.
Foto: Gleybert Asencio
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