En el edificio Grand Prix, ubicado en la avenida Tamanaco de El Llanito, las fallas del servicio eléctrico dejan sin agua a los residentes, en su mayoría de la tercera edad. En dos años, ni Corpoelec ni la Alcaldía del municipio Sucre han prestado ayuda.
Caracas. Desde el año 2020 habitantes del edificio Gran Prix, en la avenida Tamanaco de El Llanito, tienen problemas por las fallas en el servicio de electricidad, debido al deterioro de una tanquilla de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec). La instalación no tiene rejillas ni sistema de drenaje, por lo que constantemente se llena de agua y basura.
La deficiencia de la luz es permanente en esta zona del municipio Sucre. Cuando llueve, la tanquilla se llena de agua y, además, hay un bote de agua en una de las residencias de la zona que la inunda. Los vecinos denunciaron que los cables generan cortocircuitos y por el agua estancada “bota humo”.
Los afectados contaron a Crónica.Uno que el daño de la tanquilla fue ocasionado por una gandola que se paró sobre ella, en el año 2020. A partir de entonces, la avería empeoró.
El primer incidente los dejó hasta 15 días sin servicio eléctrico. Ahora, puede variar entre tres y cuatros días.
Los principales afectados son los residentes del edificio Grand Prix, una estación de servicio que está ubicada al frente y la Unidad Educativa Colegio San Lucas.
En el edificio se va la luz de forma parcial –o completa– en muchos de los apartamentos. En la vivienda de Zulimar Villanueva, vecina de la torre residencial, la electricidad se va solo en la cocina, el lavadero y el baño.
Para que la nevera de Zulimar funcione debe usar una extensión y así poder conectarla a otro lado donde sí hay electricidad. En dos ocasiones ha tenido que mandar a reparar su nevera.
El Observatorio Gasto Público de Cedice, en su monitoreo de servicios en el mes de junio de 2022, registró que 60 % de los venezolanos manifestaron estar sin servicio de energía eléctrica por más de una hora al día. El estado Táchira es el más perjudicado, con un promedio de más de nueve horas diarias sin luz.
Afectadas personas de la tercera edad
Al no tener servicio eléctrico, las bombas hidráulicas que se usan para llenar y surtir el agua en el edificio no funcionan. Los residentes deben bajar por las escaleras hasta el tanque subterráneo y cargar agua. La mayoría de los habitantes de las residencias son personas de la tercera edad.
Trina Vargas, de 66 años de edad, vive con su hermana, de 86 años. Su apartamento queda en el piso cuatro y se ven afectadas cuando no hay luz porque no funciona el ascensor.
A Trina le preocupa tener que usar las escaleras. Recientemente dio positivo a COVID-19 y tiene dificultad para respirar.
Otra vecina, Subaida Perdomo, contó que vive con su madre, de 82 años de edad, quien es operada de la rodilla y usa bastón; por lo tanto no puede usar las escaleras.
A los vecinos del edificio Grand Prix les preocupa que se presente una emergencia con los adultos mayores o las personas con discapacidad y que el ascensor no funcione.
Corpoelec sin equipos y sin soluciones
La vecina Trina Vargas es arquitecto y trabaja en construcción. Confesó que para lograr que Corpoelec los ayude “medianamente”, tuvo que pedir prestada una bomba de achique para extraer el agua de la taquilla, pues l empresa estatal no tenía el equipo.
El pasado 8 de agosto una cuadrilla de Corpoelec drenó el agua de la tanquilla. Sacó los desechos y reparó los cables de la tanquilla. No obstante, los vecinos continúan con su denuncia para que le pongan una tapa a la tanquilla, pues de lo contrario el problema seguirá.
De acuerdo con las personas contactadas por Crónica.Uno, Corpoelec ha hecho reparaciones “a medias” y no sellan la tanquilla con las rejillas, que se llevaron en 2021 para repararlas.
“No saben dónde están esas rejillas. Dicen que las van a traer, pero cada vez nos dan una respuesta diferente. Espero que no caiga una persona ahí. ¿Será que están esperando que ocurra una tragedia para hacer las reparaciones como Dios manda?”, cuestionó Vargas.
Asimismo, aseguró que en ocasiones anteriores motos y carros han caído en esa tanquilla.
Los afectados denunciaron que también han pedido ayuda a la Alcaldía del municipio Sucre, pero no les ha prestado atención porque es un problema que no les compete directamente.
Inseguridad
La falla de luz también deja inactivo el cerco eléctrico. A Zulimar Villanueva le preocupa que esto pueda comprometer su seguridad y la de sus vecinos.
Alertó que en unos edificios cercanos se metieron a robar en los estacionamientos. A su juicio, el peligro puede aumentar en las noches porque el alumbrado público de la avenida Tamanaco es escaso y se torna muy oscura.
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