La variación de precios de productos como pescado y chigüire y la imposibilidad de los consumidores de adquirirlos podrían generar cambios en el consumo de platos típicos de la época
Barinas. Las comidas y costumbres de los barineses podrían sufrir variaciones durante la Semana Santa debido a los elevados costos de los ingredientes para la preparación de los platos típicos que suelen comerse en la entidad, siempre aderezado con ese toque andino.
Por estos días es común ver una variedad de platillos con chigüire o capibara, bien sea en empanadas, pabellón o con arepas. Otros suelen optar por los pescados en una gran variedad, entre los más comunes en la zona está la cachama.
Durante los días de la Semana Santa los precios de los alimentos en el Mercado La Carolina se ubican en el siguiente orden: chigüire en 8 dólares el kilo, bagre fresco en 5 dólares, la cachama y la curvina en 3 dólares, el coporo y palometa en 1,5 dólares el kilo y el bagre salado en 7 dólares.
Yovanny Alejo, vendedor que suele ubicarse en las afueras del expendio, aseguró que la Semana Santa es una temporada de movimiento y que las ventas han ido mejorando en los últimos días. Las preferencias se inclinan por el bagre rayado fresco.
Tanto el chigüire como el pescado suelen ser traídos cada año desde los altos apureños, por lo que su valor suele variar si se le agregan costos del combustible o el número de horas para su traslado.
Alternativa costosa
En la Redoma Industrial, a la salida del estado Barinas, cada año se pueden observar a los expendedores, quienes ofrecen los productos ligeramente incrementados, en comparación con el Mercado La Carolina. El chigüire se oferta en 10 dólares, el pescado en 8 dólares, el dorado en 7 dólares, el babo en 6 y el valentón en 7 dólares.
Para quienes acuden al mercado Bicentenario de Barinas, este año no se ha observado la presencia de vendedores de pescado o chigüire. Lo que puede ser una señal de que serán pocas las ofertas en estos días.
En lo que respecta a los dulces, hay una variedad de ellos que suelen ser consumidos durante la Semana Santa. Desde el tradicional dulce de lechosa, cabello de ángel, dulce de coco, coco con piña, dulce de higo y de ñame, los cuales pueden llegar a costar menos de un dólar el kilo, en el mercado La Carolina.
Lo más caro puede ser el coco, que se vende a 30 bolívares la unidad, o la piña que suele variar según el tamaño y su procedencia, entre 70 y 100 bolívares”, dice Renny Suárez, expendedor en este sitio.
Ana Ceballos, una de las consumidoras entrevistadas, prefiere el chigüire, el pescado fresco, el babo y el pescado seco en piscillo. Los suele acompañar con lentejas, arvejas y sus respectivos dulces.
En Calderas suena la creatividad
La parroquia Calderas, municipio Bolívar, siempre se distingue por una variedad de tradiciones y comidas que poco se consumen en otros lugares de la entidad. Además de los dulces conocidos por todos, en la zona es muy popular el dulce de nuez, el “curruchete”. Este se elabora con panela de queso y pan salado o galletas de soda o saladas.
Se cocina la panela en agua hasta que se derrite. Luego se le pone queso en cuadritos, se deja un rato y cuando se apaga se le echa el pan o las galletas en pedacitos. Se sirve frío o caliente, dice el señor Henry Becerra, habitante de este pueblo.
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