Los precios del rubro de salud son los que más aumentaron en marzo y los servicios de vivienda (a excepción de telefonía) tienen la inflación acumulada más alta en el primer trimestre de 2021, con 238,6 %.

Caracas. El Banco Central de Venezuela (BCV) divulgó las cifras del índice nacional de precios al consumidor (INPC) de los últimos dos meses, destacando que la inflación siguió desacelerándose y en marzo fue 16,1 %, la más baja en un año.

Febrero, por su parte, cerró con 33,8 % de inflación e, incluyendo las cifras de enero (46,6 %), Venezuela acumula tres meses consecutivos con desaceleración del INPC, según cálculos del BCV.

El ritmo contrasta con el estimado por el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), que calculó índices de 55 % (en enero), 50,9 % (febrero) y 9,1 % (marzo), para una inflación acumulada de 155,3 %, por encima de la de 127,8 % calculada por el BCV.

De igual forma, cálculos hechos por Crónica.Uno reflejan que, al menos en mercados municipales y supermercados de Caracas, alimentos como la carne de res, el queso duro, el arroz y la papa tuvieron incrementos de 20 % a 50 % entre marzo y abril.

La inflación interanual (3012,2 % entre marzo 2020 y marzo 2021), sin embargo, es la más alta en ese lapso a excepción de diciembre de 2020, cuando llegó a 2959,8 %. Comparada con la inflación en el primer trimestre de 2020 (185,6 %), la acumulada de este año ha sido menor, con un comportamiento similar al estimado por firmas y analistas.

Con los índices correspondientes a febrero y marzo, los precios de servicios de vivienda (a excepción de teléfono) fueron los que más aumentaron en el primer trimestre de 2021, con una inflación acumulada de 238,6 % (55, % en febrero y 21,4 % en marzo).

La inflación de marzo del rubro de salud (21,7 %) fue la más alta en el mes, a la que le siguieron vestido y calzado (21,2 %) y equipamiento del hogar (20,3 %). Esos tres rubros, junto con esparcimiento y cultura (138,9 %) también son los que más inflación acumulan en el trimestre (196,1 %, 172,2 % y 138,8 %), según el BCV.

Cabe destacar que desde mediados de marzo el gobierno de Nicolás Maduro impuso tres semanas consecutivas de cuarentena radical, debido al aumento en el número de contagios por COVID-19, por lo que solo tenían permiso para abrir los negocios de venta de alimentos y medicinas.

El comercio de otros productos, el turismo, el esparcimiento y la hostelería han sido de los sectores más afectados por las restricciones de movilidad, sumado a la contracción económica que ya suma siete años consecutivos.

Restaurantes y hoteles, por ejemplo, tuvo una inflación de 15,5 % en marzo, mientras que la de bienes y servicios diversos fue 16,7 %. Alimentos y bebidas no alcohólicas, por su parte, tuvo aumentos alrededor de 13,6 % en marzo y 33,6 % en febrero.

La inflación de marzo de servicios de comunicaciones (como telefonía fija y móvil, televisión por suscripción e internet) fue 10,8 %, aunque el sector es uno de los más controlados y supervisados con tarifas reguladas impuestas por organismos del Estado.

A inicios de marzo, representantes del Ministerio de Comercio Nacional y la Superintendencia para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) visitaron la sede de la empresa Inter y exhortaron a que mejorara su servicio.

Semanas después, el Ministerio de Comunicación abrió un procedimiento administrativo contra Inter y NetUno por presuntas irregularidades en el cobro de sus servicios. El 6 de abril, las autoridades ordenaron a Inter bajar hasta 15 % las facturas de sus servicios correspondientes a marzo.

En cuanto a alquiler de vivienda, los precios han aumentado 86,7 % en tres meses, en un momento en el que el gobierno de Maduro mantiene la prohibición de desalojos por incumplimiento de pagos, medida que acumula más de un año en vigencia.

Servicios de educación, por su parte, es el rubro que menos ha variado y tiene una inflación acumulada de 61,07 % al primer trimestre de 2021, con clases que siguen siendo a distancia en medio del colapso del sistema educativo.

Aunque debido a la pobreza de aprendizaje producto del colapso y la pandemia, algunas familias recurren a las tutorías privadas para que les enseñen a sus hijos, con montos que van desde los 5 dólares por clase y ascienden a 120 dólares mensuales entre el pago del colegio y los tutores.


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