Sin respuesta y con una deuda que alcanza los 300 dólares por cada trabajador, están los vigilantes del ”“ quienes aseguran tener más de seis quincenas sin recibir sus pagos correspondientes. Sostienen que la directiva del hospital, responsabiliza a la Onapre por el retraso en el pago.
Maturín. Alrededor de 39 trabajadores, adscritos al grupo de seguridad interna del hospital Universitario Manuel Núñez Tovar de Maturín (Humnt), denunciaron que desde hace tres meses, no reciben los pagos correspondientes a sus quincenas.
Los miembros del equipo de seguridad indicaron que al momento de hacer la contratación, la directiva del centro de salud prometió cancelar una quincena de 50 dólares y hasta ahora no han honrado el compromiso.
“Pidiendo prestado”, así dice que han estado estos meses para poder subsistir y a pesar de que no han recibido el pago ni respuestas satisfactorias, no han abandonado sus puestos de trabajo.
Nos deben tres meses de pago. Cuando nos llamaron para el equipo de seguridad, nos dijeron que íbamos a recibir un pago quincenal de 50 dólares más beneficios como una bolsa con proteínas mensualmente. Y en cuatro meses nos han dado dos bolsas nada más y sin ninguna proteína”, manifestó Jackson Ferreti.
Ferreti asegura que han elevado la queja a los directivos del hospital e incluso autoridades del área de salud y la respuesta es negativa, alegan que han tenido problemas administrativos.
“Nos dicen que hay problemas con la Onapre y eso lo dicen cuando llega el 15 y el 30. No nos han dado otra respuesta diferente a esa. A nosotros nos ha tocado pedir prestado para pagar pasaje, comprar comida. Mi hija empezó a clases y yo no le he podido comprar ni una camisa”, resaltó Ferreti.
Los trabajadores sostienen que son padres de familia y deben velar por el sustento del hogar, por está razón solicitan que les paguen lo que adeudan que se calcula en al menos 200 dólares.
Esperanza
Precisan que cuando inició el proyecto habían más de 50 vigilantes y hoy solo continúan 39. Los que han tomado la decisión de retirarse lo han hecho por el incumplimiento en el pago acordado.
Seguimos viniendo para que no digan que no nos van a pagar porque abandonamos el trabajo. Nosotros necesitamos nuestros 200 dólares porque además viene la temporada decembrina y eso es un gasto para quienes somos padres de familia”, puntualizó.
El grupo refirió que han tenido que caminar hasta el hospital Central por la falta de dinero para pagar pasaje, mientras que los que viven en parroquias foráneas como El Furrial, deben pedir prestado a sus vecinos para seguir asistiendo al trabajo.
Destacaron que ya están “cansados” de solo recibir respuestas negativas y no soluciones al problema que presentan desde hace más de tres meses.
“Todo ha sido un incumplimiento y necesitamos una respuesta firme porque nosotros tenemos necesidades y hay que resolverlas. Ya no sabemos en qué lugar reclamar para que nos paguen”, acotó Ferreti.
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